Mirotic y Portis ‘fuman’ la pipa de la paz y resucitan a los Bulls
La temporada no pudo empezar de peor manera para Nikola Mirotic y sus Chicago Bulls. A la incertidumbre por su futuro (estuvo más de dos meses en el mercado como agente libre), que finalmente se resolvió con una suculenta renovación, se unió el gran escándalo de pretemporada. Durante un entrenamiento, allá por el mes de octubre, el hispano-montenegrino se vio envuelto en un desagradable incidente que terminó con el exjugador del Real Madrid hospitalizado. Una discusión con su compañero Bobby Portis por la dureza del partidillo concluyó con un puñetazo de este último sobre Niko, que sufrió una doble factura facial.
Las consecuencias fueron fatales. Uno, baja indefinida por las lesiones; el otro, ocho partidos de sanción por conducta antideportiva. Los míticos Bulls estaban en boca de todos, pero en esta ocasión no por los triunfos que han caracterizado a la franquicia de Illinois en la historia reciente de la NBA. El inicio de temporada es por todos conocidos: peor equipo de la competición, con un balance de victorias y derrotas absolutamente paupérrimo. Ni el retorno de Portis tras su castigo sirvió de revulsivo.
Pero llegó el pasado 9 de diciembre, fecha prevista para la vuelta a las pistas de Mirotic. Chicago visitaba aquella madrugada a los Charlotte Hornets, un equipo no excesivamente potente pero obviamente con mejores registros que el conjunto dirigido por Fred Hoiberg. Hasta entonces, Bulls poseía un balance de victorias y derrotas de 3-22, lo que le hacía albergar pocas esperanzas. Sin embargo, se llevaron el triunfo, con un Mirotic que disputó 15 minutos, anotando 6 puntos y capturando 3 rebotes.
Previamente a este partido, los implicados en la pelea habían sellado la paz. Las disculpas del norteamericano habían sido aceptadas por el hispano-montenegrino. El vestuario volvía a la normalidad y el retorno de Niko parecía ayudar también en la pista. En esta primera ocasión fue algo más psicológico, pero a partir de aquí se desató la tormenta.
En los nueve siguientes partidos, Bulls ha conseguido 7 victorias y tan sólo 2 derrotas. ¡Y qué 2 derrotas! Ante Cleveland Cavaliers y Boston Celtics, dos de las franquicias, junto a Toronto, dominadoras en la Conferencia Este. Y aquí viene el análisis más profundo de la recuperación de Chicago. Ya no sólo es una cuestión psicológica, es un tema también de juego. Las estadísticas de Mirotic son sencillamente espectaculares. Desde su debut ha jugado de media 25 minutos por partido, anotando 18,5 puntos y capturando casi 8 rebotes. ¡Ahí es nada!
«Mirotic ha contagiado al resto de compañeros su confianza», ha manifestado el técnico Hoiberg con la vuelta del ala-pívot. Y es que el ex del Real Madrid ha hecho mejores al propio Portis, a Dunn, a Valentine o a Markannen, por poner algunos ejemplos. Ha provocado que veamos la mejor versión de estos jugadores, que no eran tan malos como reflejaba el balance de 3 victorias y 22 derrotas del inicio de campaña.
La NBA al completo se deshace en elogios ante las actuaciones de un Mirotic que se ha erigido en la gran estrella de la franquicia del United Center. Los mandamases de Chicago pensarán ahora que no estuvo tan mal aquel contrato de 27 millones de dólares que firmaron el pasado verano con el ‘44’. ¿Servirá todo esto para que Bulls alcance los ‘play-offs’? Se antoja complicado pero al menos en la ‘Ciudad del Viento’ ya no se avergüenzan de su equipo y disfrutan mucho más de lo que sufren. Ahora bien, restan casi dos tercios de la temporada. Con la dinámica que lleva el equipo, quién sabe. Soñar es gratis.