Madrid prevé un impacto económico anual de 500 millones por la llegada de la Fórmula 1
Madrid está apostando muy fuerte por formar parte del calendario del Mundial de la Fórmula 1 próximamente. Hace unos días, Liberty Media, grupo propietario de la mayor competición de automovilismo del mundo, registraba a través de una empresa filial los dos posibles nombres que podría tener el Gran Premio de la capital de España, que son «Madrid Grand Prix» o «Fórmula 1 Madrid Grand Prix». De hecho, el propio presidente de IFEMA Madrid, José Vicente de los Mozos, confirmaba al mismo tiempo que el organismo está pendiente de que le llegue el contrato para hacer de este proyecto una realidad: «Sé cuándo lo vamos a firmar y cuándo lo vamos a hacer».
Todo lo que sucedió la semana pasada es «un paso importante, pero no es el gran paso, de momento es anecdótico». Así lo explica Jorge López, profesor de gestión deportiva en la Universidad Europea de Madrid y director de los cursos de especialización online de la escuela universitaria Real Madrid, en declaraciones a OKDIARIO. Lógicamente, dar nombre a un proyecto es síntoma de que las negociaciones están muy avanzadas y, sobre todo, «una declaración de intencione»s. Según el catedrático, todo esto es una «consecuencia de todas las acciones» que se han ido realizando. Desde luego, no es un paso que se haya dado «por casualidad», ya que desde IFEMA se ha hecho una inversión muy grande a la hora de «vincular su nombre al de la Fórmula 1».
Y lo más importante, es que se está trabajando a destajo en los aledaños del circuito, invirtiendo en una expansión que no tiene otra intención que «celebrar conciertos, eventos» y «vincularse mucho con el tema del ocio, más allá de la parte de IFEMA y el recinto ferial». Además, el catedrático dio una estimación sobre la cantidad que se espera «conseguir» con una «especie de hub de restauración», que rondaría entre los «150 y 180 millones de euros anuales».
Pero, el principal motivo de ese registro es dar un «porqué». Una explicación que dé respuesta a por qué se tiene que celebrar un Gran Premio de Fórmula 1 en la capital de España. Eso es en lo que se está trabajando realmente puesto que «la evolución que están haciendo en cuanto a entretenimiento, ocio y restauración» puede llevar a «pensar que, efectivamente, en IFEMA lo tenían pensado desde antes». Es por ello que dar un nombre puede ser «el último paso de un proceso de evolución de seis años». Además, el experto se lanzó a dar un ejemplo que ya sucedió similar a lo que podría pasar con la zona en cuestión. «Dejar el circuito de forma permanente para poder cubrir costes e incluso tener beneficios con eventos, conciertos, restauración. Es decir, que se convierta en lo que sucedió en Sevilla con la Expo de 1992, que se desarrolle una parte de la ciudad», afirmó López.
Entre 400 y 500 millones de euros anuales
Según el catedrático, «todo depende de cómo continúe la inflación en los próximos años», pero su estimación es que Madrid podría llegar a «conseguir 500 millones de euros». De momento, él prefiere optar «por un modelo más conservador de alrededor de los 400 millones de euros en impacto económico». Unas cifras que López ha extraído de la suma de distintos parámetros como el número de visitantes al evento (con entrada para los tres días de Gran Premio), ocio, restauración, merchandising, además de alojamiento y transporte para aquellas personas que vengan de fuera de la capital (60%-70%), o de España (30%-50%).
A esto hay que sumar las menciones en redes sociales de Madrid, IFEMA y el evento, patrocinio, actividades de fan engagement, que habrá muchas, y sueldos de trabajadores. También habrá personas que vengan por trabajo y que, como mínimo, «ocuparán otras 5000 habitaciones entre hoteles de 3-5 estrellas». Por último, aunque el Gran Premio dure tres días, «el gasto alrededor del mismo son más de siete».
«Se parece a lo que ha hecho el Real Madrid con el Santiago Bernabéu, han sido capaces de ganar el derbi de los estadios porque van a traer más talento de artistas musicales… Van en esa línea. Es una manera de reinventarse muy buena», señaló López al ser preguntado por los beneficios económicos que podrían traer consigo un Gran Premio en Madrid, a lo que añadió que «la estimación» de Isabel Díaz Ayuso, quien afirmó que cada asistente podría gastar «un mínimo de 500 euros al día» y que el total se contabilizará en «miles de millones», «puede ser perfectamente válida» y que no le «sorprende».
Una cantidad que se podría ingresar sumando distintos factores. «Alrededor de la Fórmula 1 en esa zona habrá desde apartamentos y hoteles turísticos hasta nuevos puestos de restauración, food tracks, actividades de entretenimiento con las que van a conseguir una cuota de mercado mucho más grande y te pueden meter actividades vinculadas con la Fórmula 1 y que la gente va a consumir ya no en IFEMA, sino a tres kilómetros porque se desarrolla alrededor», añadió López.
El catedrático, una vez mencionada la presidenta de la Comunidad de Madrid, afirmó que «el hecho de que salga ahora» el registro de la marca «es una estrategia muy interesante para posicionar al Partido Popular», pese a que otros partidos contrarios «siempre» vayan a «criticar, por lo que sea». Quedan aún cuatro años para conocer que finalice el mandato de Ayuso pero, según López, «hay un público» que «puede valorar positivamente» la llegada de la Fórmula 1 a Madrid.
Guerra Madrid-Barcelona
Sin embargo, aunque José Vicente de los Mozos se muestre reacio a una guerra entre la Madrid y Barcelona, ciudad donde se alberga el Gran Premio de España, López piensa que «va a ser difícil» que esto no acabe sucediendo y, más complicado aún que las dos se puedan beneficiar al mismo tiempo, por lo menos más de «tres años». «En principio Liberty no quiere que haya dos, puede ocurrir que haya dos durante tres años y que luego quiten una de las dos. Puede ser que vayan alternando, habría que verlo porque también es verdad que Barcelona está metiendo muchísimo dinero para mantener el Gran Premio de España en Montmeló», indicó el experto.
Una guerra que podría inclinarse más hacia el bando madrileño por distintas causas a lo largo de los próximos años. «Madrid no es Barcelona en el sentido de que te permite un mejor acceso desde determinadas zonas de España, al igual que un buen acceso desde cualquier parte del mundo en general. Esa capacidad de atracción… Barcelona la tiene menos. Es una zona nueva que está menos desarrollada a nivel turístico, es decir, no saturas tanto lo que es Madrid, eso es muy importante. Es una excusa de inversión para desarrollar este área», señaló López.
Lo que está claro es que traer la Fórmula 1 a Madrid, arrebatándosela hipotéticamente a la Ciudad Condal, sería un golpe encima de la mesa. «Hay una parte político-cultural entre Madrid y Barcelona importante y quitárselo a Barcelona también tiene un efecto positivo, es una medalla que te pones. A nivel de posicionamiento de marca de Madrid es muy grande», remarcó López.
Lección en Europa
Además, para el experto, acercar el ‘Gran Circo’ a la capital española también serviría para competir de tú a tú a nivel económico con las grandes potencias europeas, como «Londres», una ciudad también está apostando por albergar una carrera de Fórmula 1. «Cuando tú posicionas una capital a partir del deporte hay una inversión bastante importante, en cuanto a dinero, y esto es la excusa perfecta para dar una lección, para que te reconozcan mucho más, para que la gente piense en venir, para desarrollar actividades muy vinculadas con la innovación, no sólo la Fórmula 1», prosiguió López, quien después habló del interés que podría despertar Madrid en cuanto a la llegada de capital extranjero.
«Esa vuelta de tuerca a IFEMA que te permite explotarlo durante 365 días al año para que tenga sentido. No pienso que vaya a ser un circuito de quita y pon sin ningún tipo de inversión. No va por ahí. Todo el cambio del modelo de negocio que está haciendo IFEMA va en esa línea, ya no es un recinto ferial, ahora es un lugar de ocio, entretenimiento, restauración, deporte. Al final es traer mucho capital de fuera, mucho capital propio, un proyecto que probablemente sean tres o cuatro años de inversión público-privada. Tiene su interés sin duda», afirmó.
Protagonismo español
Por último, tener dos pilotos nacionales compitiendo en el Mundial de Fórmula 1 es un gran atractivo para los aficionados españoles a este deporte, pero también un condicionante que fomentaría la marca España en el Gran Premio de Madrid, según López. «Con ellos tienes una mayor capacidad para jugar con patrocinadores locales y extranjeros que quieran entrar en el mercado español. Al final mientras esté Carlos Sainz llama la atención, todo lo que toca Fernando Alonso tiene mucho más interés, pero es un proyecto a varios años. Alonso puede que no llegue pero ya te ha abierto la puerta de entrada, compita o no, posiblemente esté en el paddock.», explicó.
«Va exactamente en la misma línea que el Santiago Bernabéu. El modelo de negocio que va a montar IFEMA es el mismo caso, todo el tema de ocio, de innovación va a ir ahí. Es una oportunidad única para transformar el posicionamiento de Madrid en Europa, para atraer inversión privada y para desarrollar algo que perdure en el tiempo, que sea alrededor del evento pero que figure 365 días, que al final es lo más importante. Ser capaz de hacer algo así, posiblemente con mucha mayor flexibilidad que lo que es la candidatura de Barcelona, porque al final tiene circuito pero no puede reutilizarlo para realizar otras cosas», volvió a insistir López.
No es flor de un día
Lo que ha dejado claro el catedrático es que todo este proyecto no puede ser flor de un día, y su aprovechamiento los 365 días del año es prácticamente una obligación para recoger los frutos sembrados durante estos años. «En general, donde recupere más inversión IFEMA, no es tanto la semana del evento sino explotando luego los recursos que ha generado gracias a ese evento para otras actividades de ocio turístico y negocio. El reto es ser capaz de traducir todo lo que tienes alrededor del evento para que no se pierda el resto del año», concluyó Jorge López.