Lewis Hamilton: «Mi mayor miedo es no ser tan grande como puedo llegar a ser»
No es muy habitual que los pilotos de Fórmula 1 concedan entrevistas que vayan más allá de lo convencional. Por eso, cada vez que se da la oportunidad, es realmente interesante repasarlas. Es lo que ha sucedido con Lewis Hamilton en la revista Interview Magazine, donde el piloto ha charlado de una forma más que distendida con su amiga Serena Williams. Carreras, miedos, su madurez… de nada se ha escapado el bueno de Lewis.
De lo más interesante que comenta Hamilton en esta entrevista a la que hacemos referencia es el proceso de madurez que cree haber seguido. El británico lo ejemplifica con cómo se toma la Fórmula 1 ahora y cómo lo hacía antes. Mientras que en sus comienzos ganar lo era todo para él, ahora afirma tomárselo de una manera más pausada. “Antes la Fórmula 1 lo era todo. Te entrenabas, cometías errores y sabías por qué los habías cometido. Pero los volvías a hacer y la caída era espectacular. Nunca acababa. Me llevaba días recuperarme. Llegué a estar cuatro días sin salir de la habitación de un hotel. Pero, ahora, con la edad, he madurado y me he dado cuenta de que ganar no lo es todo”. A pesar de esto, Hamilton asegura que no ha perdido un ápice de su espíritu competitivo, algo que salta a la luz no solo en las carreras. “Sé que hay gente que espera que falle, y yo espero ganar. Odio perder. No me importa si es en una carrera o al ping-pong, lo odio. O eres primero o el último”.
Como todos los grandes campeones de la historia del deporte, Hamilton tiene un punto ególatra que le hace ser plenamente consciente de sus grandes posibilidades. Y es ahí precisamente donde encontramos uno de sus miedos, que resume en una de esas frases que quedan grabadas para la posteridad. “Más que ninguna cosa, mi miedo es no ser tan grande como sé que puedo llegar a ser”.
Por último, Hamilton toca un tema tan personal como el miedo. Si bien afirma no sentirlo nunca al volante de un monoplaza de Fórmula 1, sí que reconoce que hay cosas en la vida que le dan pavor. Por ejemplo, las arañas. “Tengo otros miedos, como las arañas. Cuando voy a Australia, miro debajo de la toalla que llevo en el asiento”. Genio y figura el amigo Lewis.