Filipe Luis sólo quiere ir al Barça
Filipe Luis no va a renovar con el Atlético de Madrid y sólo contempla una salida al Barcelona, club por el que estuvo a punto de firmar en 2009
Filipe Luis termina contrato con el Atlético este verano y no va a renovar. El lateral tiene una oferta del club encima de la mesa de ampliar su vinculación por un año, como hace con todos los jugadores que superan los 30 años los renueva de año en año. Pero el brasileño quiere un contrato de al menos dos años, algo que va en contra de la política del club con los futbolistas que pasan la treintena.
Es por eso que, aunque el jugador quiere quedarse, su segunda etapa como rojiblanco llegará a su fin al término de esta temporada. Según ha podido saber OKDIARIO, su opción número uno es el Barcelona. Al lateral le encantaría jugar en el club azulgrana y los de Valverde andan buscando un jugador que pueda dar descanso a Jordi Alba, que este año lo ha jugado prácticamente todo y es el que menos ha descansado de la plantilla. El amor es mutuo entre ambas partes puesto que el Barça hace años que anda detrás del brasileño y además llegaría libre.
Filipe Luis tiene ofertas de la Bundesliga. Borussia Dortmund y Bayer Leverkusen se han interesado en sus servicios, sin embargo las ha rechazado porque sólo quiere ir al Barcelona. Su primera opción siempre ha sido quedarse en el Atlético, pero al no ajustarse la propuesta del club a sus condiciones ha decidido no seguir. Tras tomar esa decisión y conocer el deseo del Barça por ficharle, el cuadro catalán se ha convertido en su primera opción.
A día de hoy el jugador no contempla otra salida que no sea al Barcelona y está dispuesto a esperar hasta el final. El lateral encaja a la perfección en el perfil que buscan los azulgrana, experimentado, de largo recorrido y barato (llegaría gratis). Sus caminos estuvieron a punto de cruzarse en 2009 cuando el brasileño todavía militaba en las filas del Deportivo. A pesar de que el deseo del zaguero era jugar en el Camp Nou, Lendoiro no aceptó la oferta del Barça y se quedó un año más en Coruña.
Al año siguiente se marchó al Atleti, pero Filipe reconoció en su momento que «fue muy duro no fichar por el Barça». Pero justo cuando pensaba que ese tren ya no volvería a pasar, ha vuelto a efectuar su entrada en la estación y esta vez quiere subirse a él. Es por eso que, a sus 33 años, está decidido a emprender una nueva aventura en el club azulgrana y no le importa ser el recambio de Jordi Alba.