El Barcelona torea a Rakitic con su renovación
Iván Rakitic sigue sin renovar con el Barcelona y el jugador comienza a impacientarse hasta tal punto que dejó un dardo tras el partido ante el Sevilla a la directiva culé: "El otro día intenté darle un toquecito al presidente a ver si espabila con mi renovación". La intención del club azulgrana es venderle este verano para equilibrar el Fair Play Financiero de la UEFA y hacer sitio a De Jong
Ivan Rakitic sigue esperando esa llamada del Fútbol Club Barcelona para darle forma a su nuevo contrato, esa renovación que lleva pidiendo sigilosamente desde hace meses y que estos días proclamó a viva voz. Tras lograr superar la eliminatoria de cuartos de final de Copa del Rey ante el Sevilla, en el que marcó el 2-0 y firmó un excelso encuentro, el mediocentro croata lanzó una pullita hacia la directiva culé sobre su ampliación.
El 4 blaugrana fue el elegido tras el pitido final para valorar el pase de la eliminatoria. Es siempre un partido especial para Rakitic cualquier enfrentamiento con el Sevilla, el club que le brindó la oportunidad para dar su paso a la élite y le abrió las puertas del Barça. Dejó de nuevo cariño para la familia sevillista y acto y seguido, lanzó su dardo, a modo de presión, para la directiva culé: «El otro día intenté darle un toquecito al presidente a ver si espabila con mi renovación».
Esas fueron las palabras del centrocampista croata, dejando muy a las claras que su intención con el Barça no es otra que la de continuar en las filas culés y no la de buscar equipo. Pese a ello, Rakitic tiene contrato aún hasta junio de 2021, por lo que le restarían dos años más de contrato aún, pero su última renovación data de marzo de 2017 y el balcánico considera que su estatus en el equipo ha cambiado desde entonces. Pero es desde la cúpula blaugrana donde no lo ven así.
De hecho, es la directiva culé la que estuvo moviendo desde hace semanas la posibilidad de que Rakitic abandonara la Ciudad Condal, sobre todo tras el anunció del fichaje de Frankie De Jong, que llegará a partir de la próxima temporada. Se especuló que el holandés sería el recambio natural del croata y que su marcha serviría para rejuvenecer la plantilla y dar aire a la situación económica de los salarios en el vestuario. Una patada en toda regla.