El Barcelona se escapa

El Barcelona logró una importante victoria en el Benito Villamarín por 1-2 que lo coloca a ocho puntos del Real Madrid y lo hace más líder en el final de la primera vuelta del campeonato liguero. Dos goles de Raphinha y Lewandowski en la segunda mitad sentenciaron el encuentro tras un gran dominio azulgrana. El Betis apretó hasta el final gracias a un gol en propia puerta de Koundé pero murió en la orilla.

Xavi volvió a salir en Heliópolis con su ya habitual 4-4-2 para los partidos importantes. Gavi, que estrenaba su dorsal 6, y Pedri con más libertad en zonas de llegada, Balde en el lateral y Raphinha haciendo de Dembélé. Enfrente, el Betis de Pellegrini lo puso todo sobre el verde con los Fekir, Canales, Borja Iglesias, Luis Henrique y compañía.

El encuentro fue una tormenta de intensidad con un ambiente sensacional en el Benito Villamarín. Los dos equipos fueron con todo desde el inicio y no se guardaron nada para el resto del encuentro. En el minuto nueve de partido, fue el Betis quién tuvo la primera ocasión del partido con un disparo desviado de Luiz Henrique tras un cambio de orientación precioso de Borja Iglesias con el exterior.

Poco después, justo antes de llegar al primer cuarto de hora de encuentro, Lewandowski avisó con un cabezazo que se marchaba fuera. Ese fue el momento, dentro del intenso ida y vuelta, donde el Barça comenzó a imponer su juego, y a través de ahí llegaron las mejores ocasiones a favor del cuadro azulgrana.

Pedri perdonó tras una maravilla

Pedri está en un momento de forma espectacular. Tras cumplir 100 partidos con el Barcelona, el internacional español quiere seguir haciendo historia con la camiseta blaugrana. En el minuto 18 se plantó sólo frente a Rui Silva tras dejar a dos defensas verdiblancos por los suelos después de un regate hipnótico. Pero en vez de disparar a bocajarro, decidió intentar regatear al portero bético sin éxito. Se iba al limbo una ocasión más que clara.

El Barcelona comenzaba a ser superior y Pedri estaba siendo clave en los de Xavi, con mucha más libertad para jugar cerca del área rival, gracias a jugar con De Jong y Busquets por detrás. Pero la intensidad del partido no daba por muerto al Betis, que también se acercaba a la portería de Ter Stegen. Koundé tapó con éxito un disparo de Canales desde el interior del área.

En la recta final de la primera mitad, el Barcelona volvió a rozar el gol con dos ocasiones claras. La primera fue de Raphinha, de cabeza, y terminó al fondo de la red, pero fue anulado por fuera de juego. La segunda llegó nuevamente en las botas de Pedri, con mucho espacio, pero su disparo lo volvió a sacar un inspirado Rui Silva con el pie.

Rui Silva era un muro

La segunda mitad comenzó con la misma tónica que el final de la primera. El Barcelona dominaba y a los tres minutos Pedri volvió a tener una nueva ocasión. Y es que el 90% del peligro culé pasaba por los pies del talentoso canario. Rui Silva volvió a disfrazarse de héroe cuajando una parada magnífica a una mano. Al Betis, en cambio, le costaba un mundo hacerle daño al cuadro culé. En el 55 lo intentaba Fekir con un blando disparo a las manos de Ter Stegen.

Raphinha estaba supliendo a Dembélé y en su primera gran oportunidad no la estaba aprovechando. Fallón, torpe, individualista y desacertado. El brasileño no estaba aportando nada positivo al juego de sus compañeros. A la hora de partido, buscó dos penaltis consecutivos con dos piscinazos descarados.

Raphinha: de villano a héroe

Era una realidad que Raphinha estaba siendo el peor jugador del Barcelona sobre el césped. Pero el fútbol, a veces, tiene cosas sorprendentes que lo hacen un deporte maravilloso. El Barcelona se adelantó en el Benito Villamarín en el minuto 65 y Raphina fue el héroe.

Medio gol fue de Balde, que era una bala por el costado izquierdo. Su velocidad era imparable y la defensa del Betis no lo podía parar. En una de sus subidas hasta línea de fondo, tras un pase de De Jong que sacó una faltada de manera muy ligera desde un sitio mucho más adelantado, puso un pase perfecto al segundo palo, y allí apareció el villano para ponerse la capa de héroe. Raphinha apareció por sorpresa, libre de marca, para anotar el 0-1 a portería vacía.

Tras el gol del Barcelona, merecido por el dominio, el partido se calentó. El Betis se llenó de amarillas y el juego se revolucionó. En el minuto 68, los verdiblancos perdonaron el empate. Borja Iglesias no sabía que estaba tan sólo, y con la portería entera para él, decidió pasarla atrás perdiendo la pelota.

Lewandowski sentenció

Daba la sensación que Lewandowski no estaba cuajando su mejor partido. Pero eso en un jugador con la calidad del delantero polaco da igual. Porque a la media que tenga te sentencia. Y eso hizo el nueve del Barcelona para amarrar la victoria en el Benito Villamarín.

En el minuto 80, tras un balón colgado, Araújo peinaba la pelota al segundo palo para que Lewandowski hiciese una de las suyas. El delantero polaco se anticipó a un defensor bético y en dos toques sentenció al Betis. Control orientado y gol, tras un remate preciso. 0-2 tras una segunda parte con un color muy azulgrana.

Xavi hizo su primer cambio en el minuto 81. No creyó que hubiese que cambiar nada y el equipo le respondió a las mil maravillas. Ansu Fati y Ferran Torres entraban por Gavi y Raphinha.

El Betis terminó apretando

Y cuando el Barcelona pensaba que iba a tener un final de partido tranquilo, una carambola le dio vida a Betis en los últimos minutos. En el 85, tras un centro de Sabaly al segundo palo, Koundé se metió un gol en su propia portería. Ter Stegen no lograba su decimoquinta portería a cero en Heliópolis. Su propia defensa lo impedía con un autogol que ponía el Villamarín patas arriba.

Xavi no quería sustos y sacaba a Kessié por Pedri a falta de dos minutos. El Betis, mientras, apretaba e intentaba a la épica buscar un empate que parecía imposible. Pero murió en la orilla. El Barcelona defendió bien los últimos instantes y logró una victoria vital.

Con esta victoria, sufrida solamente al final, el Barcelona se escapa en el liderato de La Liga y se coloca de manera momentánea a ocho puntos del Real Madrid, a la espera de lo que hagan los de Ancelotti este jueves frente al Valencia en el Santiago Bernabéu.