Todas las lavadoras lo tienen y casi nadie lo sabe: la función oculta que acaba con las manchas más rápido que tu abuela


La lavadora es un electrodoméstico que utilizamos prácticamente a diario, pero, aún así, hay ciertas funciones de ella que desconocemos y nos pueden hacer la vida mucho más fácil. En el caso de las manchas en la ropa, solemos cometer el error de meter las prendas en la lavadora pensando que van a desaparecer como por arte de magia. Sin embargo, si la suciedad está muy incrustada, el lavado normal no es suficiente para ablandarla; es más, las manchas pueden incrustarse más en las fibras, sobre todo en ropa delicada. Aquí es donde entra en juego la función de prelavado en las lavadoras
Esta función reproduce lo que nuestras abuelas hacían de forma manual: remojar y ablandar la suciedad antes del lavado principal. Durante mucho tiempo, eliminar manchas de café, sudor o grasa era un proceso muy laborioso: frotar la prenda, dejarla en remojo con jabón, volver a frotar y finalmente enjuagar. Ahora, esta función de la lavadora permite replicar este proceso, pero de manera más eficaz y respetuosa con la ropa.
La función secreta de las lavadoras para eliminar manchas difíciles
El prelavado es un ciclo que se ejecuta antes del lavado principal, en el que la temperatura del agua es de 30 °C, y se utiliza un detergente específico que actúa sobre la suciedad superficial e incrustada. El tambor gira lentamente entre 20 y 30 minutos, tiempo suficiente para aflojar la suciedad sin dañar las fibras del tejido. Este ciclo no sustituye al lavado normal, sino que su objetivo es preparar la ropa para que el detergente principal actúe de forma más eficiente. Esto es especialmente útil en ropa deportiva, uniformes de trabajo o prendas infantiles que suelen acumular suciedad difícil de eliminar.
Para sacar el máximo partido a esta función, es fundamental conocer el cajetín del detergente y respetar las dosis indicadas por el fabricante para evitar residuos o exceso de espuma. La mayoría de lavadoras incluyen tres compartimentos:
- I: detergente para prelavado.
- II: detergente principal para el lavado normal.
- Asterisco o flor: suavizante o aditivos opcionales.
Consejos prácticos
El primer paso para que el prelavado cumpla su función es clasificar la ropa según su tejido, color y nivel de suciedad. De esta manera, se puede ajustar la temperatura y elegir el detergente adecuado para cada prenda. Por ejemplo, las prendas de algodón resistente pueden soportar agua más caliente, mientras que tejidos como lana o seda requieren agua tibia para no encogerse ni perder su forma. Asimismo, los detergentes para ropa de color contienen aditivos que protegen los tintes, mientras que los detergentes para ropa blanca suelen incluir agentes blanqueadores.
Un error muy habitual al utilizar esta función es llenar demasiado el tambor para, supuestamente, ahorrar tiempo y energía. Sin embargo, esta práctica reduce significativamente la eficacia del prelavado. Cuando el tambor está muy lleno, las prendas no giran correctamente y el detergente no puede penetrar de manera uniforme en los tejidos. Como resultado, algunas manchas no se ablandan y la suciedad superficial puede redistribuirse en lugar de eliminarse. Para optimizar el ciclo, es recomendable llenar el tambor hasta un 75-80% de su capacidad.
Truco casero
Aunque el prelavado funciona muy bien, algunas manchas pueden ser especialmente resistentes, como las de tinta, vino tinto, grasa muy incrustada o maquillaje. Para estos casos, existen trucos caseros que ayudan a ablandar las manchas sin dañar los tejidos.
- Humedece ligeramente la zona con agua fría.
- Luego, espolvorea una capa fina de bicarbonato de sodio sobre la mancha y frota suavemente con los dedos o con un cepillo de cerdas suaves. Esto crea una especie de pasta que absorbe parte de la grasa o de los pigmentos de la mancha. Para manchas de vino tinto o tinta, puedes añadir unas gotas de vinagre blanco a la mezcla.
- Deja que repose unos 5 a 10 minutos.
- Después, aclara con agua fría antes de introducir la prenda en el ciclo de prelavado de la lavadora.
Las lavadoras del futuro
Una de las tendencias más prometedoras es la automatización. Las lavadoras del futuro serán capaces de identificar el tipo de tejido, el nivel de suciedad y la composición de las manchas gracias a sensores avanzados y cámaras integradas. Esta información permitirá ajustar automáticamente el ciclo, la temperatura del agua, la cantidad de detergente y la duración del lavado.
Otro avance significativo será la inteligencia artificial aplicada al cuidado de la ropa. Las lavadoras podrán «aprender» de cada lavado, detectando cuáles son los programas más eficaces para cada tipo de prenda y ajustando su funcionamiento según las preferencias del usuario. Por ejemplo, si una camiseta de algodón siempre tiene manchas de grasa, recordarán el patrón y aplicarán un prelavado más intensivo con detergente enzimático automáticamente.
En resumen, las lavadoras del futuro combinarán inteligencia artificial, eficiencia energética, conectividad y cuidado del medio ambiente para ofrecer una experiencia de lavado personalizada, eficaz y respetuosa con la ropa y el medio ambiente.