Hogar

Ni ventilador ni aire acondicionado: el sencillo truco casero para bajar la temperatura de casa sin gastar ni un euro

Bajar la temperatura de casa
Mujer posando en la ventana de su hogar. Foto: Freepik.

Con el avance del verano, el aumento de las temperaturas provoca que los interiores acumulen calor, afectando la comodidad y, en ocasiones, el descanso. Esto lleva a la implementación de medidas para bajar la temperatura de casa que, aunque simples, resultan más que útiles para llegar a ese anhelado alivio.

La inversión en aire acondicionado o ventiladores puede suponer un gasto elevado en electricidad. Por ello, han cobrado relevancia técnicas domésticas que aprovechan elementos disponibles en cualquier hogar. Una de ellas destaca por su facilidad de aplicación y por no requerir un desembolso económico.

¿Cuál es el truco casero para bajar la temperatura de casa sin gastar ni un euro?

El truco para bajar la temperatura de casa sin invertir dinero es nada más y nada menos que fregar toda la casa con agua fría. El suelo actúa como una superficie de gran retención térmica. Al fregar con agua fría, el líquido absorbe parte de ese calor durante su evaporación.

Este proceso físico provoca que el entorno inmediato se enfríe ligeramente, ayudando a bajar la temperatura de casa de manera temporal.

Este método es especialmente útil si se aplica por la mañana. En ese momento, la temperatura exterior es más baja y el efecto refrescante se prolonga durante varias horas. Además, mojar el suelo de una habitación justo antes de permanecer en ella intensifica la sensación de frescor.

Para optimizar el resultado, se recomienda:

  • Utilizar agua fría directamente del grifo.
  • Evitar secar el suelo de inmediato, permitiendo que el proceso de evaporación actúe.
  • Repetir la operación en las zonas más utilizadas del hogar.

La importancia de bajar la temperatura de casa de forma natural

Mantener una vivienda fresca durante los picos de calor no depende únicamente de aparatos eléctricos. El control de la temperatura interior mediante métodos naturales permite reducir el consumo energético y minimizar la exposición directa al aire frío, que en exceso puede generar molestias.

La acumulación de calor en suelos, paredes y techos contribuye a que el ambiente permanezca caldeado incluso cuando baja la temperatura exterior.

Este fenómeno se conoce como inercia térmica, y gestionarlo adecuadamente es clave para lograr un interior más agradable.

Otras medidas complementarias para bajar la temperatura de casa

Aunque fregar con agua fría es eficaz, combinarlo con otras prácticas puede potenciar su efecto. Entre ellas:

  • Mantener persianas bajadas y cortinas corridas durante las horas de mayor radiación solar.
  • Ventilar en momentos estratégicos, como a primera hora de la mañana o por la noche, para renovar el aire.
  • Evitar el uso de electrodomésticos que generen calor como el horno o la plancha en las horas centrales del día.
  • Ubicar plantas en ventanas y balcones para crear sombra y mejorar el microclima.
  • Apagar luces innecesarias, ya que muchas emiten calor adicional.

Estas acciones reducen la entrada y acumulación de calor, favoreciendo que el frescor logrado con el agua fría se mantenga por más tiempo.

Vaporización y enfriamiento de textiles: una alternativa que pocos conocen

Una variante del método consiste en utilizar un vaporizador para rociar con agua fría elementos textiles como cortinas, tapicerías o alfombras. Al evaporarse, el agua absorbe calor del entorno y contribuye a bajar la temperatura de casa de forma localizada.

Esta técnica es útil en habitaciones que no se usan de forma continua, ya que el efecto se nota más en espacios cerrados durante algunos minutos posteriores a la aplicación. Se recomienda aplicarla en combinación con una buena ventilación para evitar exceso de humedad.

Lo último en Curiosidades

Últimas noticias