¿Qué hacer cuando el niño trae malas notas?
Por regla general, la Navidad es sinónimo de alegría y de felicidad, pues es tiempo para descansar y para estar toda la familia reunida. Pero no podemos olvidar que también va a asociada a la desesperación, enfado e incomprensión de algunos padres ante las notas que traen sus hijos a casa en el primer trimestre. Y es que se topan con el hecho de que los menores han suspendido varias asignaturas o han obtenido unos resultados muy por debajo de lo que esperaban.
Si ese es tu caso, si te has encontrado con unas calificaciones muy malas de los pequeños seguramente estarás ahora en una situación en la que no sabes bien qué hacer. No te preocupes, a continuación, encontrarás una serie de recomendaciones que te serán de gran utilidad:
1-No perder los nervios
El primero y más importante de los consejos que hay que seguir es no perder los nervios. Al ver las notas no hay que comenzar a chillar ni tampoco, por supuesto, alzar la mano. La violencia, sea verbal o física, no es una solución a lo ocurrido. Por lo tanto, en ese caso, lo mejor es calmarse y “pensar en frío”, por supuesto, eso no significa que no haya que mostrarle al menor la disconformidad por las notas que ha conseguido.
2-Sentarse a hablar
La segunda recomendación que hay que seguir es la de optar por la comunicación. Es decir, lo que se debe hacer es sentarse con el hijo y analizar lo ocurrido. Es vital que se haga en un espacio relajado y manteniendo un tono tranquilo en todo momento. Así, frente a frente, se le deberá preguntar qué ha sucedido para obtener esos malos resultados y eso supone, por tanto, escucharle hasta que acabe pues puede ser que realmente tenga un problema.
3-Tomar medidas
Una vez que se hayan escuchado los argumentos del menor, llegará el momento de adoptar medidas. Así, en base a las causas que hayan originado las malas notas se deberá apostar por actuar de un modo o de otro:
-
En el caso de que así lo manifieste el niño y de que se perciba que tiene algún problema de aprendizaje o alguna circunstancia personal que le está afectando, hay que ponerse en manos de expertos. Así en base a la situación se deberá optar por confiar en un pedagogo, un psicólogo…
-
Si se percibe que el origen de todo está en su carácter retraído, en su falta de relación con sus compañeros de clase o en que no está a gusto en el aula, deberá hablarse con el pequeño y también, después de las vacaciones, con el tutor para poder actuar en consecuencia.
-
Si todo se trata de un acto de rebeldía, dejadez o pasotismo del niño, los padres deberán mostrarse inflexibles al respecto. Eso supondrá, entre otras cosas, establecer un castigo ajustado a las notas, determinar unas normas mucho más estrictas en casa respecto al estudio y a salir con los amigos e incluso apostar por clases de refuerzo.
4-Ayuda del centro
Por supuesto, independientemente de la causa o causas que hayan originado unas calificaciones tan malas, es imprescindible acudir al centro escolar del menor para entrevistarse con el tutor. De esta manera, se intercambiarán impresiones, se podrán conocer quizás aspectos que se desconocían del comportamiento o actitud del niño e incluso, en común, se podrán determinar pautas a seguir para así apostar por mejorar su rendimiento.
5-Todos unidos
Fundamental, a la hora de lograr que mejore sus resultados académicos, es que toda la familia esté unida en ese sentido. Es decir, que ambos padres le dejen patente al menor no sólo que están dispuestos a ayudarle sino también que, cuando este pase de todo, van a mantener una postura firme y común respecto a las medidas que deben tomarse para poder atajar lo ocurrido.
Este aspecto es muy importante, especialmente en los casos de parejas separadas o divorciadas porque, en muchos casos, esas diferencias entre ambas partes son los resquicios que aprovechan sus hijos para “torearlos” y para conseguir que uno de los dos adultos le dé “cuartelillo”.
Otros consejos
Las recomendaciones anteriores son las más importantes a la hora de afrontar las malas notas que ha llevado a casa el menor. No obstante, también deben tenerse en cuenta otros consejos tales como estos que mostramos a continuación:
-
Motivarle para que intente mejorar sus resultados.
-
Reforzarle de manera positiva siempre que dé pasos en pro de acabar con las pésimas calificaciones.
-
Trabajar para que consiga tener una rutina diaria de trabajo y también para que empiece a hacer uso de técnicas de estudio que le ayudarán a mejorar notablemente.
-
En la medida que sea posible, es vital también que los padres dediquen tiempo a estar con el menor y a ayudarle en las tareas que consideren necesarias. Eso sí, ayudarle es solventar sus dudas o darle consejos, no hacer su trabajo.