Problemas habituales en la piel del recién nacido
La llegada de un bebé siempre trae consigo cambios en la vida de los padres. Cada niño es peculiar y hay que tener en cuenta que mostrará unas particularidades específicas, sobre todo, en la alimentación y en los ritmos del sueño. No obstante, lo que suelen tener todos los bebés en común es la piel. Esta es muy frágil, por lo que deberá prestársele todos los cuidados necesarios. Pero a veces, a pesar de eso, siempre surge algún problema:
Ictericia
Puede ser que, a los dos o tres días de nacer, la piel del bebé presente un color amarillento. Es lo que se conoce como ictericia, pero, en principio, no hay que preocuparse porque desaparecerá espontáneamente en unos días. Además hay que subrayar otros datos de interés:
- Se produce a consecuencia de que el hígado aún no se encuentra del todo preparado para poder procesar la bilirrubina del cuerpo. No obstante, también puede tener lugar este problema si el pequeño no recibe suficiente cantidad de leche materna.
- Por regla general, el color amarillo empieza haciéndose presente en la cara. Y a partir de ahí puede extenderse al cuello, al pecho e incluso a los dedos de los pies.
- Los bebés prematuros o los que tienen un hermano que también la tuvo son los que más probabilidades tienen de sufrirla.
- No obstante, si esa singular tonalidad persistiera, una solución es poner al niño en las zonas más iluminadas de la casa, pero nunca al sol directo. De la misma manera, si pasa mucho tiempo con esta problemática y no se pasa hay que acudir al pediatra porque puede ser un caso grave que afecte al sistema nervioso.
Costra láctea
Un problema más serio que la ictericia, con el que se pueden encontrar los padres, es el de la llamada costra láctea. Se trata de que, a veces, aparece en el cuerpo del bebé una especie de placas gruesas de un color amarillento de apariencia grasa:
- Hay que tener claro que por regla general esas mencionadas placas suelen estar adheridas al cuero cabelludo. Sin embargo, también pueden hacerse presentes incluso en las cejas y en la zona de atrás de las orejas.
- ¿Cómo se deben tratar? Los pediatras coinciden en subrayar que se aplique sobre la zona un aceite específico. Esta acción se hará mediante un suave masaje y dejando que actúe la loción.
- Después de haber aplicado el aceite, lo que se debe hacer es proceder a lavar la zona con un champú infantil adecuado.
Dermatitis del pañal
Otro de los problemas más frecuentes es la irritación de la zona del pañal, que se conoce como dermatitis del pañal. La zona aparece enrojecida y se aprecia escozor. La mejor manera de combatirla es evitando su aparición:
- Para eso es fundamental acabar con la humedad en los pañales, por lo que es imprescindible cambiarlos tan a menudo como sea necesario y secando bien la zona.
- También existen cremas que protegen la piel del bebé, pero siempre se deben atender las indicaciones del pediatra.