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5 infecciones durante el embarazo que pueden provocar defectos de nacimiento en los bebés

La infección por el virus de la rubéola o por citomegalovirus son dos de las infecciones que si se contraen durante el embarazo pueden afectar al bebé.

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Qué infecciones del embarazo pueden afectar a nuestro bebé
Blanca Espada

Un embarazo saludable asegura el nacimiento saludable del bebé, algo a lo que todas las mujeres aspiran cuando están embarazadas. Sin embargo, el embarazo puede hacer que las mujeres sean más susceptibles a ciertos tipos de infecciones que pueden tener graves consecuencias. Conozcamos ahora 5 infecciones durante el embarazo que pueden provocar defectos de nacimiento en los bebés

5 infecciones durante el embarazo que pueden provocar defectos de nacimiento en los bebés

En algunos casos, incluso una infección leve puede provocar un problema grave que puede volverse perjudicial para la madre y para el bebé. Puede provocar un aborto espontáneo, un parto prematuro o defectos de nacimiento. La infección incluso puede transmitirse al bebé en el útero a través de la placenta o durante el parto.

Cómo afecta la infección a  tu embarazo

Las infecciones cutáneas, vaginales (UTI) o de las vías respiratorias no presentan complicaciones graves. Estas pueden controlarse o tratarse tomando medicamentos y el tratamiento adecuado. Sin embargo, algunas infecciones específicas, que en su mayoría no se diagnostican debido a la falta de síntomas claros, pueden resultar peligrosas para el embarazo. Puede provocar un aborto espontáneo, muerte fetal, bajo peso al nacer o defectos de nacimiento como disfunción de múltiples sistemas orgánicos en el bebé. La detección temprana de infecciones y la prevención es la única forma de minimizar el riesgo y asegurar la salud de sus hijos. Conozcamos entonces qué infecciones pueden ser dañinas durante el embarazo.

Infección por citomegalovirus

La infección por citomegalovirus (CMV) es la infección más común que puede provocar un defecto congénito en los bebés o puede transmitirse a los recién nacidos. Las mujeres afectadas por CMV durante el embarazo pueden aumentar el riesgo de CMV congénito en los bebés al nacer, inflamación de la retina, erupción presente al nacer, cabeza anormalmente pequeña, piel amarilla o bajo peso al nacer. Algunos bebés incluso pueden tener problemas neurológicos a largo plazo, que pueden tardar años en manifestarse.

El virus del citomegalovirus está presente de forma natural en el medio ambiente y puede ser difícil de evitar; por lo tanto, puede ser difícil de diagnosticar. Las mujeres embarazadas pueden protegerse lavándose las manos con frecuencia y evitar el contacto con niños más pequeños que pueden transmitir el virus fácilmente.

Infección por el virus de la rubéola

La infección por el virus de la rubéola durante el primer trimestre puede ser muy grave. Puede provocar un aborto espontáneo, un parto prematuro y la muerte del feto. Los bebés nacidos de una madre infectada con este virus pueden sufrir una afección llamada síndrome de rubéola congénita. Los síntomas del síndrome incluyen defectos en los ojos, oídos, corazón, microcefalia, cabeza anormalmente pequeña, autismo y retraso motor. No hay ningún tratamiento disponible para esta afección. Las mujeres embarazadas deben vacunarse contra el virus de la rubéola antes del embarazo para desarrollar inmunidad y evitar complicaciones.

Infección por Estreptococo del grupo B

La infección por estreptococo del grupo B es causada por una bacteria conocida como estreptococo del grupo B. Este tipo de bacteria aparece y desaparece de forma natural en el cuerpo y en la mayoría de los casos no es dañina. En casos raros, puede causar una enfermedad grave en personas de todas las edades y puede causar una infección grave en los recién nacidos. El virus generalmente se transfiere de la madre al niño durante los partos vaginales, ya que la bacteria puede estar presente en la vagina o el recto de la madre. Durante el embarazo, la bacteria puede causar inflamación interna y también muerte fetal. Si no se trata, la infección puede causar defectos de nacimiento en el bebé, incluida la pérdida de audición o visión y problemas mentales.

Infección por el virus del zika

La infección por el virus del Zika se transmite por el mosquito Aedes, que pica durante el día. Cuando se infecta con este virus, la madre puede transmitir la infección al bebé, lo que puede provocar defectos de nacimiento graves, como microcefalia y anomalías cerebrales. No hay ningún tratamiento disponible para prevenir este virus. Por lo tanto, al viajar a países afectados por el virus del Zika, las mujeres embarazadas deben tener un cuidado especial y usar repelente de insectos.

Infección por toxoplasmosis

La infección por toxoplasmosis es causada por el parásito protozoario Toxoplasma gondii. Esta infección se transmite principalmente por gatos, que se infectan al comer roedores y aves infectadas con este parásito. Es por eso que se aconseja a las mujeres embarazadas que eviten cambiar la arena para gatos, ya que el parásito se transmite principalmente a través de las heces. Aparte de esto, la carne cruda o parcialmente cocida, la tierra y el agua también pueden causar esta infección.

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