Carta de una madre desesperada a la que le han quitado a sus hijas: «La Fiscalía se pone de perfil»
"Mis hijas de 7 años conviven con el padre, presunto abusador sexual, en el mismo domicilio en que pudieron ser abusadas"
"El IMAS balear es omnipotente y presuntuoso y actúa en base a su innata malicia y guiado por el negocio"

Queridos lectores y amigos:
El pasado 11 de enero se cumplió un año del cruel robo de mis dos hijas mellizas, Cristina y Natalia, que hoy en día cuentan con 7 años de edad y que me fueron arrebatadas por el IMAS en base a unos falsos desamparos y alto riesgo. Todo ello para proteger a un padre, presunto abusador sexual de ellas cuando sólo tenían 4 años. No he podido verlas, ni besarlas, ni hablarles desde el 4 de mayo de 2021.
Pero no voy a volver a contar la triste vida de mis hijas ni la desesperación como madre. Escribo esta carta para ser fiel a mi compromiso de informar de los nuevos acontecimientos que, desgraciadamente, son nefastos.
Sois más de 20.000 las personas que me venís haciendo visualizaciones y más de 8.000 las que me comunicáis vuestro apoyo y me animáis en la lucha y la lucha es desproporcionada.
Mientras el IMAS balear es omnipotente, presuntuoso y considerado como quinto poder y actúa en base a su innata malicia y guiada por el negocio, es decir, es GOLIAT, yo, a pesar de contar con el apoyo de 8.000 personas de toda España, sólo soy una ciudadana de a pie, pero me muevo con valores como ser mujer, ser madre, con sentimientos, justicia, verdad, fuerza, valentía y ,sobre todo, humanidad. Soy DAVID.
La presidenta del Govern, la sra. Armengol, y la directora del IMAS, la sra. Fernández Valiente, se jactan, tantas veces pueden, de su feminismo, su lucha contra el machismo, por la igualdad, por la defensa de la familia.
Pues bien, tanto yo como mis hijas somos mujeres víctimas y el presunto agresor sexual de éstas y maltratador mío es un hombre; ellas están colaborando activamente en destruir la familia, entre otras muchas, la mía. Si bien es cierto que cuando se trata de las suyas, el resultado es descaradamente protector.
La principal falseadora de informes de desamparo, la técnica 152 del IMAS, es familia directa de la consellera del ramo y la directora del IMAS es esposa del alcalde de Palma, José Hila.
No quiero, no sé, entrar en política y en cuestiones jurídicas. Pero llama mucho la atención que el Govern balear y sus órganos de la Administración autonómica infrinjan una nueva Ley Orgánica, la 8/21, elaborada, articulada y aprobada en el Congreso por el PSOE y sus socios. En ella, se prohíbe a los padres que estén inmersos en un procedimiento penal que visiten a sus hijos.
Pues bien, aquí no sólo las visita, sino que por mandato, autorización, recomendación o sugerencia del IMAS, mis hijas de 7 años conviven con el padre, presunto abusador sexual de ellas, en el mismo domicilio en que pudieron ser abusadas.
El Ayuntamiento de Santa Margalida en Mallorca deniega, por imposición del IMAS, derechos de la madre (que os está escribiendo) a informaciones por negarle la patria potestad, que recientemente le reconoce el Juzgado de la Mujer número 1 de Palma, en resolución firme.
El Juzgado de la Mujer número 1 de Palma ha requerido al IMAS que aporte una serie de decisiones adoptadas. La LECIV establece 10 días para atender este requerimiento judicial.
Han transcurrido cerca de dos meses sin contestar y aquí no pasa nada, se ponen de perfil tanto el Ministerio Fiscal como el propio Juzgado. Lo más novedoso, de esta pasada semana, es la actitud del Defensor del Menor en Baleares. Desde el primer momento surgieron disculpas para no actuar: «Es un tema sometido a jurisdicción». Nadie le pide que se persone, pero sí que inste a la Fiscalía a que actúe e informe y al IMAS a que atienda los requerimientos judiciales. Esto último se hizo, sin fructificar, ya que las niñas estaban bien con el padre.
Sin dar más detalles por mi parte, por protección de datos, puedo decirles que, además del ilícito penal más arriba señalado, una de las niñas padece una enfermedad de origen de abusos sexuales y que la medicación prescrita lo confirma. El parte médico es de la Seguridad Social de Santa Margalida.
El Defensor del Menor se comprometió a darme por escrito estas gestiones. Ahora lo niega y no se da cuenta de que tengo pruebas, entre ellas, el testimonio de su técnica asistente a la reunión donde adquirió su compromiso.
Pido a quienes se encuentren en situaciones similares que actúen con valentía. Sus hijos, como mis dos niñas, están en juego.
Gracias a todos.
Cristina Martín.