Armengol ‘perdona’ ahora el requisito del catalán a los médicos ante la grave falta de profesionales
Creará un bolsín de médicos de familia donde se exime a los aspirantes de tener el certificado de catalán
Faltan médicos de familia en la mayoría de centros de salud y es urgente cubrir una veintena de plazas
Armengol deja a los enfermos de cáncer en Ibiza sin oncólogos por la exigencia del catalán
Armengol se queda sin auxiliares disponibles para el área de Salud tras echar a 1.700 por no saber catalán
Baleares expulsa a otros 1.692 auxiliares administrativos de la sanidad por no acreditar el catalán
El Govern balear que preside la socialista Francina Armengol se encuentra con una acuciante falta de profesionales de la medicina y ha firmado ahora una resolución para crear un bolsín de médicos de familia donde se exime a los aspirantes de tener el certificado de catalán incumpliendo así la ley aprobada en 2016 por el pacto de izquierdas que gobierna en las Islas. Es la ley por la que se exige acreditar el conocimiento de la lengua catalana para trabajar en la Administración autonómica.
La llegada del verano y las vacaciones de los médicos, unido a las bajas de profesionales que se siguen produciendo por el coronavirus, ha derivado en un déficit de personal sanitario en todas las áreas y especialmente en los centros de salud. Faltan médicos de familia en la mayoría de centros de salud y es urgente cubrir una veintena de plazas.
En Baleares gobierna el pacto de izquierdas formado por el PSOE, Unidas Podemos y el partido nacionalista Més per Mallorca. La Consejería de Salud, con Patricia Gómez (PSOE) al frente, aplica generalmente el decreto de 18 de noviembre de 2016 aprobado por el anterior pacto de izquierdas, que establece que entre los requisitos para entrar en las bolsas de interinos está el conocimiento del catalán. Ahora, ante una situación de emergencia, se olvida de este decreto ampliamente criticado por los profesionales de la Medicina y los sindicatos del sector sanitario.
Hasta la aprobación de este decreto, el conocimiento del catalán era un mérito pero no un requisito. En el ámbito sanitario la norma afecta tanto a los celadores como también a todo el personal, médicos y enfermeras incluidos, lo que ha generado constantes protestas del sindicato médico Simebal y más en esta época de crisis sanitaria.
Ser un excelente médico no es un mérito suficiente para trabajar en la sanidad pública de Islas si no se tiene el certificado de catalán.
Un reciente informe del Ministerio de Política Territorial señala que en 2016 había en Baleares 13.116 médicos en la sanidad pública y que en 2021 la cifra había bajado a 11.690. Se ha prescindido, por diferentes motivos, de 1.426 médicos y las plazas no se han cubierto por la imposibilidad de encontrar a profesionales con el certificado de catalán.
La exigencia del requisito del catalán durante años, junto al elevado precio de la vivienda y el reducido plus de insularidad, había generado el acentuado déficit de sanitarios en Ibiza y Formentera, algo que resulta especialmente dramático para los enfermos de cáncer por la falta de oncólogos.
Ante esta situación desesperada, la Consejería de Salud de Patricia Gómez se vio obligada a incumplir la normativa aprobada por el Govern de izquierdas y ya no exige el requisito del catalán a los médicos especialistas, aunque sigue siendo obligatorio para el resto del personal sanitario.
Armengol quita el catalán a los especialistas, pero la decisión llega demasiado tarde y cuando se ha llegado a un punto límite. El Govern de Armengol ha ahuyentado a los médicos en Baleares y de forma especial en Ibiza y Formentera al añadir a la falta de incentivos la obligación de saber catalán.
El pasado mes de mayo la Consejería de Salud se quedó sin auxiliares disponibles tras agotar la lista de interinos después de haber echado a 1.700 aspirantes a estos puestos de trabajo por no tener el certificado de catalán. Posteriormente, ante la situación de emergencia, la Consejería de Salud no tuvo más remedio que ampliar el bolsín de interinos, pero lo hizo volviendo a exigir el certificado de catalán, lo que augura más problemas para cubrir todas las vacantes.
La realidad es que la exigencia del catalán le está generando un problema tras otro a Salud, aunque por regla general se resiste a modificar o incumplir su propia normativa. El pasado 29 de septiembre OKBALEARES desvelaba que el Ejecutivo de Armengol había decidido excluir a 2.600 aspirantes a ocupar una plaza en los hospitales y centros de salud de Baleares por no tener acreditado el conocimiento del catalán. En aquella ocasión eran 12 enfermeras de Urgencias, 2.500 celadores y unos 40 trabajadores sociales e higienistas bucales.
Meses más tarde el Govern rectificó y realizó una nueva convocatoria para enfermeras donde ya no se hablaba del requisito del catalán.