costas

Armengol declara la guerra a los chiringuitos de playa y provoca la pérdida de decenas de empleos

Ordena a la Demarcación de Costas la progresiva eliminación de los populares quioscos y 'beach clubs' en las playas de Baleares

De momento ya ha cerrado siete con el argumento de regenerar el medio ambiente y los sistemas dunares

El PP afirma que esta media arruina a los concesionarios y denuncia que no tiene ningún efecto en el medio ambiente

Los 5 chiringuitos imprescindibles a los que ir este verano

La Junta de Andalucía apoya a los chiringuitos y hamaqueros

Chiringuitos
Uno de los chiringuitos de la playa de Es Trenc ya desaparecido.

El Govern de izquierdas de Baleares que preside la socialistas Francina Armengol ha decidido acabar con los populares chiringuitos de playa, lo que ocasionará la desaparición de decenas de puestos de trabajo. De momento, con el argumento de regenerar el medio ambiente en el litoral de Mallorca, el Govern ha dejado sin licencia siete quioscos de playa que este verano ya no podrán abrir sus puertas.

El PP de Baleares ha registrado en el Parlament una interpelación al conseller de Medio Ambiente del Govern de Francina Armengol, Miquel Mir, por “querer llevar a la ruina” a los chiringuitos de las playas del archipiélago. El portavoz de los populares en la comisión de Medio Ambiente del Parlament, Javi Bonet, defiende esta interpelación para “evidenciar que estos ataques a los chiringuitos no tienen ningún efecto en la protección de los espacios naturales, sino que el único efecto es la ruina que va a traer a estos negocios”.

Muro, Santanyí y Campos

En el municipio de Santanyí, el Ejecutivo autonómico ha impulsado un restrictivo Plan de Ordenación de Recursos Naturales del Parc de Mondragó que implica la desaparición del chiringuito de Sa Font de n’Alis. Además, contempla una drástica reducción de sombrillas y tumbonas tanto en esta playa como en la de S’Amarador. En esta zona restringe además el acceso a vehículos privados y embarcaciones turísticas.

En la popular playa des Capellans, de la localidad de Muro, tres establecimientos se han quedado sin licencia de actividad para poder abrir sus puertas, al igual que en el Parque Natural de Es Trenc (municipio de Campos) donde otros tres dejarán de funcionar ubicados en la Colònia de Sant Jordi, Ses Covetes y Es Trenc. En esta zona ahora hay siete chiringuitos desmontables.

A todo ello se añade la desaparición de la piscina del restaurante Mar y Paz, en Can Picafort, que ha estado en activo durante 52 años recibiendo cada verano la visista de muchos residentes y turistas. La pisicina ya ha quedado sepultada bajo los escombros y el espacio que ocupaba será de caracter público.

En la playa de es Capellans de Muro, los tres restaurantes situados en la zona (Opa & Oma, La Ponderosa y Can Gavella) desaparecen por decisión de la Demarcación de Costas (organismo del Gobierno central) a instancias del Ejecutivo autonómico. Costas justifica la decisión en que existe una distancia inferior a los 200 metros entre cada una de estas instalaciones.

Interpelación del PP

El PP ya denunció la cruzada del Govern de Armengol contra los chiringuitos en un reciente plenod el Parlament. Ahora ha registrado la interpelación urgente por los informes realizado por el Govern del pacto de izquierdas instando a Demarcación de Costas a eliminar diferentes chiringuitos en las playas de las islas, así como terrazas de restaurantes a pie de playa.

“Medio Ambiente está haciendo informes ideológicos que van mucho más allá de la Ley de Costas y que rompen con el equilibrio entre la protección de los espacios naturales y la actividad económica”, alerta Bonet, que mantiene, como denunció en el pleno, que “el objetivo del Govern es chiringuitos cero en Balears”.

El diputado popular defiende “la protección y conservación de los espacios naturales, especialmente de aquellos más frágiles, como los sistemas dunares”, pero recuerda que la Ley de Costas de 2013 ya “estableció las condiciones para garantizar su protección, como que las estructuras debían ser desmontables, pero permitiendo mantener la actividad de los chiringuitos existentes, como así ha sido hasta la fecha”.

Sin embargo, lamenta que  “las exigencias que se plantean ahora, como la prohibición de terrazas o de tener alternadoras, suponen acabar con los chiringuitos y, sin embargo, no tienen ningún efecto en la protección de los espacios naturales”. “El único efecto es la ruina que va a traer a todos estos negocios”, concluye el parlamentario popular.

Sólo con el cierre de los chiringuitos de la Playa de Muro, se perderán 50 puestos de trabajo fijos salvo que el  Gobierno central estime la alegación presentada por los titulares de las concesiones y por el propio Ayuntamiento del municipio.

La eliminacion de los chiringuitos ocasionará además una importante pérdida de ingresos a los Ayuntamientos. El PP de Campos, que gobierna el Consistorio, ya emitió recientemente un comunicado en el que afirma que el informe remitido por el Govern para la supresión de estos tres quioscos de playa «constituye un intento de culpabilizar a los chiringuitos de la masificación y la degradación de la playa», mientras, por otra parte, el Ejecutivo autonómico «no se responsabiliza ni de la venta ambulante ilegal, ni de las terrazas espontáneas que algunos particulares montan con música».

El PP de Campos ha recordado que el Consistorio asume los gastos de vigilancia, limpieza, montaje y desmontaje de pasarelas, coordinación de playas, ordenación del tráfico y vigilancia de los accesos y mantenimiento del parking, entre otros servicios, que suman, en conjunto, unos 450.000 euros.

Como contrapartida el Ayuntamiento recibe ingresos económicos procedentes de la explotación de los aparcamientos y de los quioscos, unos ingresos que ahora se verán muy mermados. La última licitación de los chiringuitos de Es Trenc se realizó en 2018, por un valor de 772.400 euros.

Lo último en OkBaleares

Últimas noticias