Agostina Rubini se sintió indispuesta tras ingerir alcohol y no pudo salir del contenedor
Una testigo vio un bolso muy cerca de uno de los contenedores y éste tenía dentro una blusa de la joven
La Policía ha encontrado varios restos óseos entre los residuos que ahora analizan para determinar si pertenecen a Agostina
Máxima expectación mediática este jueves en la Jefatura Superior de Policía de Baleares, donde el inspector jefe del Grupo de Homicidios, Ángel Ruiz, ha dado más detalles en torno a la extraña desaparición el pasado 2 de octubre en Palma de la joven argentina Agostina Rubini, de 24 años y residente en Palmanova.
«Desde el primer momento lo enfocamos como una desaparición inquietante. La tarde del miércoles -2 de octubre- hacemos un seguimiento con cámaras hasta las 23.57 horas en la Plaça des Pont, en confluencia con la calle Andrea Doria. En esta última calle, ella tenía el hábito de coger el bus 104 hacia Palmanova, al lado de una batería de contenedores», ha explicado Ruiz.
El inspector jefe de Homicidios también ha revelado que una testigo vio a las 00.12 horas un bolso a 30 centímetros de uno de los contenedores y que dentro de ese bolso había una blusa de Agostina. Para los investigadores, este hecho es el «indicio más potente de que la joven argentina accedió de forma voluntaria a uno de los contenedores».
En el interior del contenedor estaba el teléfono móvil de la chica hasta las 0.27 horas, que pasa el camión de Emaya, empresa encargada de la recogida de basuras. Ángel Ruiz ha señalado que coincide el camión con la localización del teléfono: «El tiempo que tarda en llegar a Son Reus nos hace concluir que Agostina estaba en el camión».
«Nadie vio a Agostina introduciéndose en el contenedor. Lo normal es, siguiendo el sentido común, esconderse de la gente para hacer algo así. Una vez dentro del camión es imposible sobrevivir», ha apostillado.
Por otro lado, los investigadores han apuntado que en la calle donde Agostina se cayó a un contenedor hubo un tránsito normal de vehículos y personas y que no hubo ninguna parada de ningún vehículo, por lo que concluyen que no fue forzada a entrar en ningún coche.
También han detallado que la joven argentina es una persona con baja tolerancia al alcohol, que se medicaba y que esa noche en la que salió de fiesta con sus amigos en el Paseo Marítimo de Palma hizo una pequeña parada en una tienda para comprar una bolsa de patatillas. A la persona que la atendió le llamó la atención que Agostina presentaba un notable estado de embriaguez.
El Grupo de Homicidios sostiene que Agostina accedió al contenedor a coger algún objeto y en ese momento se sintió indispuesta para salir del contenedor. Los agentes han determinado que de esos contenedores se puede salir sin ningún problema. Además, han detallado que una vez dentro del camión de basura es imposible sobrevivir.
La joven llegó en el camión a Son Reus y el móvil se apagó a las 2.59 de la madrugada, momento en el que se vierte la basura, acumulándose 12.000 toneladas de residuos, han apuntado desde el equipo investigador.
Los agentes prosiguen con la búsqueda de la joven en la planta aledaña, donde se trabaja en la incineración de los residuos y esperan acabar la criba en esta zona en tres o cuatro días.
El Grupo de Homicidios ha explicado que si Agostina fue quemada en la planta incineradora, lo normal es que queden restos óseos, unos restos que han encontrado pero ahora tienen que hacer una extracción de ADN para determinar si son humanos o no.
Además, la Policía ha informado de que a través de las cámaras que hay en la planta incineradora de Son Reus es imposible visualizar el momento en el que vierten el cuerpo de la desaparecida dada la mala calidad de las cámaras.