ARAGÓN

Azcón llevará a Sánchez a los tribunales «si el impuesto de las energéticas perjudica a Aragón»

El impuestazo a las energía nació como algo temporal y extraordinario

El País Vasco apoyaría a Sánchez en el Congreso y luego podría negociar un concierto para no aplicarlo

Aragón impuesto energéticas, Jorge Azcón, Pedro Sánchez
Jorge Azcón y Pedro Sánchez.
Paula Ciordia

El presidente de Aragón, Jorge Azcón, se ha puesto en pie de guerra contra el impuesto de Sánchez a las energéticas. El líder del Ejecutivo aragonés ha advertido este miércoles ante los medios de comunicación, que llevará a los tribunales este impuesto si la comunidad que preside se viera perjudicada, como consecuencia de convertir este impuesto solidario, temporal y extraordinario que permitió la UE en 2022, ahora en permanente, pese a que Bruselas ya en un informe de 2023, propuso ponerles fin, al salir del estado de «crisis» que justificó su imposición.

Este miércoles, el aragonés ha mostrado su «preocupación» porque este impuesto deje de ser temporal y acabe por consolidarse, en respuestas a los periodistas, anunciando que el Ejecutivo autonómico interpondrá los recursos judiciales o ante la Comisión Nacional de la Competencia «que sean necesarios», en caso de que el Gobierno de España lo consolide y «perjudique a Aragón».

Aragón y el impuesto a energéticas

Recientemente, Pedro Sánchez ha enviado un borrador a Bruselas anunciado que el impuesto a las energéticas será permanente el año que viene. En estos momentos, el sector ya aporta más de 16.000 millones de euros a Hacienda, es decir, un 6% de la recaudación en España. Con este impuesto temporal, el Gobierno nacional ha estado recaudando más de 2.000 millones al año, algo que las compañías contaban con que finalizaba este diciembre.

Mientras, el presidente de España no justifica en el Plan Fiscal los motivos de por qué convierte en permanentes estos impuestos a banca y energéticas, pese a que la Comisión Europea y el BCE advirtieron de los efectos negativos para las compañías.

De ahí que Azcón ha advertido que si el Gobierno de España consolida el impuesto a energéticas y privilegia a otras comunidades autónomas, Aragón acudirá a la Justicia o la Comisión Nacional de la Competencia. ¿Por qué el aragonés ha lanzado este mensaje? Porque se teme que el País Vasco, por ejemplo, acabe beneficiándose de su trato de favor por parte del Ejecutivo nacional. El PNV apoyaría en el Congreso la imposición de este impuesto energético, en una estrategia para lograr posteriormente el concierto económico en su comunidad y así eliminarlo, atrayendo a empresas del sector.

En este sentido, el jefe del Ejecutivo autonómico ha criticado que el impuesto se pueda impulsar como «un elemento de distorsión fiscal que beneficie a otras comunidades autónomas». «En Aragón nos vamos a defender, ya sea con recursos judiciales o con un recurso ante Competencia. Que en unas comunidades autónomas se pague el impuesto a la energía y en otras no es injusto», ha concretado.

Azcón ha subrayado que «Aragón ha hecho los deberes a la hora de implantar energías renovables y no va a tener el privilegio que otras comunidades sí van a tener. Sería absolutamente injusto», ha criticado.

Además este nuevo impuesto elevaría también el recibo mensual de los consumidores, ya que previsiblemente las energéticas trasladarían su coste al precio que pagaría el consumidor.

«El impuesto a las energéticas restará competitividad a nuestro país. Impedirá el proceso de reindustrialización, también en Aragón. A nuestra comunidad autónoma han venido en los últimos meses miles de millones de inversión por nuestra capacidad de generar energías renovables. No podemos permitir que este impuesto pare la competitividad de Aragón y frene nuevas inversiones», ha señalado Azcón.

Las energías renovables en Aragón

Esta polémica entorno al impuestazo a la energética, llega en un momento clave para la expansión de la economía aragonesa, que ha sido capaz de captar 33.000 millones de inversión en la comunidad. Los proyectos relacionados con la tecnología, los centros de datos, la automoción, y las posibilidades súper competitivas que goza Aragón para implementar energías renovables preocuparían a Azcón de cara a un impuesto que llevara a una desigualdad competitiva entre las comunidades que, como País Vasco, no sólo se pudieran escaquear de éste, sino que por ende salieran beneficiadas de que otras comunidades se lastraran.

En este contexto, hay que recordar tal y como anunció el Ejecutivo Aragón a finales de septiembre, que la comunidad presentará antes de terminar el año, el Plan Energético, en su apuesta por la «descarbonización preceptiva de la UE». Además están preparando un decreto ley de medidas urgentes, donde puedan incorporarse las conclusiones de la Comisión de Investigación de las renovables. Y como complemento, el Gobierno está impulsando una nueva ley.

La nueva ley servirá para refundir y actualizar la normativa, regular las comunidades energéticas, abordar cuestiones competenciales, regular las declaraciones de utilidad pública y apoyar los proyectos estratégicos. Puesto que como ha reiterado en múltiples ocasiones el líder autonómico, «la energía va a ser un modelo de transformación económica de Aragón» y una palanca para lograr «la cohesión social».

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