Miguel Carcaño, el panadero de la cárcel de Ciudad Real: con sueldo y de alta en la Seguridad Social
Miguel Carcaño, asesino confeso de Marta del Castillo, está cumpliendo su pena en el módulo 2 del Centro Penitenciario Herrera de la Mancha, en Ciudad Real. Según explican fuentes penitenciarias a OKDIARIO Andalucía, ha cambiado por completo su forma de vida en prisión, pasando de la práctica «indigencia» a una vida más que digna, en la que trabaja como panadero con un sueldo remunerado (unos 500 euros al mes) y está dado de alta a la Seguridad Social. Así, mientras la familia de Marta del Castillo sigue sin saber dónde está el cuerpo de la joven, Carcaño, su asesino, disfruta de un empleo que le sirve para cotizar y labrarse un futuro una vez salga de la cárcel: el 8 de mayo de 2030… siempre y cuando no se le otorguen beneficios penitenciarios.
«Su vida es normal dentro del módulo, no hay peligro para que le agredan otros internos de ese módulo, trabaja en panadería y tiene un comportamiento muy bueno. Cumple su pena en un módulo que está denominado ‘de respeto’, el módulo 2 de la prisión», explican a este periódico fuentes penitenciarias, que aseguran que «en este tipo de módulos hay una organización de vida bastante rigurosa en cuanto al cumplimiento de normas de conducta, limpieza y convivencia entre internos».
Y es que en estas zonas de la cárcel de Ciudad Real en la que se encuentra Miguel Carcaño hay presos que colaboran estrechamente con los funcionarios en puestos de responsabilidad, como por ejemplo el presidente del módulo. Además, hay presos que ejercen como secretarios e incluso se forman comités de bienvenida cuando ingresan en el departamento nuevos internos. Son los presos encargados de darle la bienvenida, hablar con él y explicarle las normas internas de ese departamento. En este módulo, recuerdan las mismas fuentes, también se asignan tareas de limpieza formando brigadas.
En este sentido, los internos que trabajan día a día con el asesino confeso de Marta del Castillo admiten que su comportamiento es «excelente». Sin embargo, a día de hoy no disfruta de ningún tipo de permiso penitenciario. Su día a día está centrado en su panadería, que le da la posibilidad no sólo de cobrar casi 500 euros al mes, sino, sobre todo, de estar dado de alta de la Seguridad Social.
Antonio del Castillo
Antonio del Castillo, padre de la desaparecida Marta, cree que la Justicia ya está «cansada» de buscar el cuerpo de su hija y esclarecer los hechos del crimen. En una reciente entrevista concedida a OKDIARIO Andalucía aseguraba que «puede ser» que los tribunales estén hartos porque «llevamos dando por culo casi catorce años». «Lo que quieren es que se acabe esto ya y que dejemos de dar por culo», asegura un irritado Antonio que, sin embargo, seguirá investigando por su cuenta hasta el final para esclarecer lo que, a sus ojos, a la Justicia le ha aburrido.
«Que yo sepa no hay avances. Yo sé que el juez dijo a todo que sí (triangular los teléfonos). Y de buenas a primeras el juez se opuso a entregar los pines de los teléfonos de quienes están en la calle. Así que sólo accedieron al de Miguel Carcaño, que además se ofreció él, y al de mi hija. O sea, han puesto trabas al perito que está trabajando para esclarecer un asesinato y encontrar el cuerpo. ¿Por qué motivo? Pues no lo sé. ¿Puede ser que la Justicia esté cansada de este caso porque llevamos dando por culo casi catorce años? ¿Es posible? Porque a mí ya alguno me ha dicho algo sobre esto. Que lo que quieren es que se acabe esto ya y que dejemos de dar por culo. De las administraciones me lo han dicho. Para mí, está claro, claro clarísimo, no te puedo decir de dónde me ha llegado la información, pero me ha llegado que esa es la opinión de las Administraciones», asegura tajante Antonio del Castillo.
«Lo que quieren es que se acabe esto ya y que dejemos de dar por culo»
«No vivo para encontrar a Marta porque yo tengo dos hijas más, y tengo dos nietas. Ya no es que me levante para eso. Porque si no, ya habría perdido las esperanzas. Yo me despierto para encontrar a mi hija, pero también tengo una familia. Tengo nietas, tengo hijas, y tengo que seguir preocupándome por ellas. Lo que no puede ser es que mis otras dos hijas me puedan echar en cara algún día que pasó esto y las dejé de lado. Para mí todas mis hijas, son iguales. Yo habría hecho lo mismo por Marta, por Lorena, por Mónica… Y no vamos a olvidar ni a una ni a otra. Por tanto, tenemos que repartirnos el día a día. Tenemos que seguir con la familia. Pero eso no va a hacer que nos olvidemos de Marta. Por mucho tiempo que pase. Es una lucha que tenemos más. Es una carga que he sobrellevado como cualquier padre», lamenta Antonio del Castillo.