Andalucía se prepara para el fin del estado de alarma: adiós al toque de queda y más libertad comercial
Andalucía trabaja en la estrategia a adoptar una vez decaiga el estado de alarma este domingo 9 de mayo. El presidente de la Junta, Juanma Moreno, ha anunciado este miércoles que a partir de entonces no habrá toque de queda en la comunidad, pero sí mantendrá el cierre de municipios con alta incidencia -tasa superior a 500- bajo autorización judicial.
En cuanto al horario de hostelería y negocios, Moreno ha avanzado que se estudia una «apertura progresiva de la libertad comercial» en dos fases, hasta que el 50-60% de los andaluces estén inmunizados. Actualmente, el porcentaje alcanza el 11,5%, el 13,8% si sólo se tiene en cuenta a los mayores de 16 años.
La Junta aboga así por una desescalada gradual ya que, a pesar de «ver la luz al final del túnel», hay que continuar siendo «muy serios y rigurosos» en la contención del Covid-19, defiende Moreno. Andalucía volvería a establecer el toque de queda «sólo si las condiciones epidemiológicas lo recomendaran», ha recalcado, «pero ahora mismo la incidencia está bajando» y se sitúa ya por debajo de 200.
El líder andaluz ha incidido también en su intención de que los ya inmunizados tengan mayor libertad y, con su debido certificado de vacunación, puedan «acudir a estadios o actos culturales, con una vida social y económica mucho más plena».
Desescalada «progresiva»
Así, el presidente del Gobierno autonómico ha abogado, a preguntas de los periodistas en Sevilla, por una desescalada «progresiva», subrayando que con «la improvisación» del Gobierno desaparecen herramientas importantes para frenar el avance del Covid-19, como el cierre perimetral de la comunidad o el confinamiento «de una persona infectada».
Ante esta situación, ha advertido que la Junta ya está preparándose «desde el punto de vista normativo» para proteger a los andaluces, con cierres perimetrales de los municipios más afectados solicitando el aval judicial, algo que «haremos en tiempo y forma y de manera exquisita, salvaguardando las competencias» de la comunidad. «Con autorización judicial, se podrá cerrar perimetralmente municipios y esto sí lo voy a solicitar. Tenemos municipios con tasa por encima de 500 y de mil casos cada 10.000», ha explicado.
«Soy partidario de hacer una desescalada progresiva. El Covid no se ha ido, siguen muriendo todos los días personas en España y Andalucía, siguen infectándose y sufriendo con la enfermedad. Por tanto, a pesar de empezar a ver la luz al final del túnel, hay que vacunar y cumplir con los objetivos de vacunación. Ser muy serios y rigurosos», ha advertido, para reclamar una vez más a la ciudadanía «prudencia» en una «desescalada suave».
En este sentido, ha señalado que la Junta, una vez no esté declarado el estado de alarma nacional y decaiga el toque de queda, «sólo lo volvería a establecer si las condiciones epidemiológicas lo recomendaran, pero ahora mismo la incidencia está bajando» y se sitúa en 197 casos cada 100.000, por debajo de la media nacional. «Si se produce un brote, usaré todos los instrumentos a nuestro alcance y no dudaré en tomar medidas por muy duras que sean para preservar la salud de las personas», ha aclarado.
Por último, se ha mostrado a favor de que los inmunizados, debidamente certificados, tengan posibilidad de tener más libertad y poder «acudir a estadios o actos culturales, con una vida social y económica mucho más plena» teniendo en cuenta que «ya hay un volumen de personas muy amplio para que puedan disfrutar de esa mayor libertad». Si bien, ha trasladado que el Ministerio no piensa así y no avala esta postura y se encuentran a la espera de la reunión del Comité Interterritorial de Sanidad que se celebra este miércoles.