Tribunales

El abogado de un inmigrante que mató a su ex novia en Huelva: «En su aldea de Mali vio muchos machetazos»

El acusado, que llegó ilegalmente a España en 2011, se enfrenta a 15 años de cárcel

Su defensa reconoce que cometió un "acto deleznable", pero pide al jurado que entienda su "situación personal"

El abogado de un inmigrante que mató a su ex novia en Huelva: «En su aldea de Mali vio muchos machetazos»
El asesino confeso, de camino a la Audiencia de Huelva. (Canal Sur)
David García de Lomana

La Audiencia de Huelva acoge desde este lunes el juicio con jurado popular contra un hombre natural de Mali acusado del asesinato de su ex pareja, una mujer rumana de 34 años, en Palos de la Frontera (Huelva) en 2023. El procesado ha reconocido los hechos, pero no la intencionalidad. Le clavó un puñal en la espalda a su ex novia porque no quería volver con él, según la Fiscalía, que pide 25 años de cárcel por un delito de asesinato con agravante de género.

La defensa ha apelado a la historia personal de su cliente para intentar rebajar la pena. Su abogado ha explicado que el acusado, de 32 años, es originario de una aldea de Mali «en la que había luchas tribales con extrema violencia». «Lo normal es que tenga miedo. Portaba el cuchillo por miedo. Nadie en España puede imaginar cómo es que maten a tus vecinos y amigos a machetazos, como hacían en su aldea», ha alegado.

El crimen tuvo lugar el 4 de abril de 2023. El relato de la Fiscalía recoge que la víctima y su asesino confeso habían mantenido tres años de relación sentimental hasta que ella decidió dejarle por sus constantes episodios de celos. Él no aceptaba la ruptura e insistía en que debían vivir juntos de nuevo. Según trascendió en su momento, la víctima tenía previsto acudir esa misma mañana a la Policía Local para denunciar a su ex pareja por acoso. Ambos trabajaban como temporeros en la campaña de la fresa. Él había llegado a España de forma irregular en 2011. Ella tenía una hija menor de edad de un matrimonio anterior.

Aquella noche, según la Fiscalía, el acusado se presentó en el domicilio de la mujer y la esperó en la puerta. Cuando llegó, sobre la 1:00 horas, se acercó a ella y le pidió que le diera un teléfono móvil y 100 euros. Tras un breve forcejeo entre ambos, el acusado agarró de la nuca a su ex pareja, agachó su cabeza hacia el suelo y le clavó en la espalda un cuchillo de grandes dimensiones. Dejó el arma insertada en el cuerpo de la víctima y se dio a la fuga. La mujer murió en el lugar de los hechos debido a una gran pérdida de sangre y daños en el pulmón. El acusado fue detenido horas después y desde entonces permanece en prisión provisional.

«Llevo un cuchillo porque tengo miedo»

Tras exponer la Fiscalía su relato de los hechos, el abogado defensor asume que su cliente cometió un «acto deleznable», pero también pide «entender su situación personal», momento en que se ha retrotraído a sus orígenes en Mali: «Es una persona enferma y con muchos traumas. Llevaba un cuchillo no para atacar, sino porque sentía miedo. Nadie niega que la matara, lo que hay que valorar es si quiso matarla o no». Ha explicado que solicitó «una pericial en psiquiatría infantil y trastornos en la infancia» para corroborar este extremo, pero no pudo conseguir dicho informe.

Además, el letrado ha recalcado que los hechos «se produjeron en el marco de una discusión por 100 euros y un móvil». «No es un asesino ni una persona violenta. No era consciente de lo que hacía y no tenía intención de hacerlo. Se confesó culpable desde el primer momento», ha añadido. Por todo ello, ha pedido que se le juzgue como responsable de un delito de «homicidio con atenuantes, pero no de asesinato».

El acusado, por su parte, sólo ha respondido a las preguntas de su abogado, primero en su idioma, ayudado por un intérprete, y finalmente en español. Ha declarado que «está arrepentido» de lo sucedido y ha explicado que abandonó su aldea natal porque había «mucha violencia y se mataba a gente». Según su versión, el día de los hechos únicamente quería recuperar su dinero y su móvil: «No quería pelea, sentí miedo y se me fue la cabeza». En cuanto al cuchillo, ha dicho que en su país «también lo llevaba», pero desde que está en España «tiene mucho miedo de que pueda pasar cualquier cosa». También se ha definido como una persona «trastornada», lo que rebajaría su pena.

El escrito de acusación de la Fiscalía subraya que el acusado actuó «con intención de matar a su ex pareja y con plena intención de dejar patente su sentimiento de superioridad y dominación por el hecho de ser mujer». El Ministerio Público y la acusación particular –que representa la hija de la fallecida, de 14 años– piden 25 años de prisión para el acusado y una indemnización de 160.000 euros para la menor. También reclaman su expulsión del país una vez haya cumplido dos tercios de la pena y su prohibición de entrada en España durante un periodo de 10 años.

El juicio continuará este martes con las testificales y se prolongará varias jornadas más con la declaración de varios testigos y las pruebas periciales solicitadas para esclarecer los hechos.

Lo último en España

Últimas noticias