El Museo de Ikea: “Bienvenido a casa”
Älmhult, una ciudad sueca a 140 kilómetros de Malmö, es el corazón de Ikea. Allí se fundó esta empresa dedicada a “mejorar la vida cotidiana de muchas personas” y allí es donde se encuentran sus oficinas centrales. Además, desde el pasado 30 de junio también es la sede del Museo de Ikea, que está situado en el mismo edificio que albergó la primera tienda el 30 de junio de 1958 y que estuvo activa hasta 2012.
Unos 20.000 objetos y muebles se exponen en los 7.000 metros cuadrados del Museo de Ikea, lo que permite al visitante sentirse como en un túnel del tiempo, ya que se encontrará rodeado de objetos fabricados desde los años 50 hasta la actualidad.
No podían faltar tampoco los catálogos, cuyas portadas lucen sus paredes y que todos pueden protagonizar. Porque uno de los grandes atractivos del Museo de Ikea es que todos los visitantes pueden hacerse su propia fotografía de portada y llevársela a casa como recuerdo.
Además de los espacios dedicados a la exposición, también hay una tienda de souvenirs, zonas para la realización de eventos y un restaurante en el que degustar los platos típicos de Ikea como las köttbullar, las famosísimas albóndigas suecas.
El Museo de Ikea abre sus puertas diariamente entre las 10 y las 19 horas (sólo permanecerá cerrado los días de Nochebuena, Navidad, Nochevieja y Año Nuevo). El precio de las entradas es de 60 SEK (unos 6’30 euros) para los adultos y 40 SEK (unos 4’20 euros) para los niños entre 6 y 17 años. Los menores de cinco años no pagan entrada, al igual que los trabajadores de Ikea. También es posible concertar una visita guiada en sueco, inglés o alemán.