8 cosas que no deberías llevarte en tus viajes

Una de las cosas que más pereza y problemas nos da a la hora de irnos de viaje es hacer la maleta. Ya sea porque viajas sin equipaje facturado o porque la bolsa que llevas es insuficiente para meter todas las cosas que necesitas, es uno de los momentos más odiados por cualquier viajero. Ese y tener que pasar el control rezando para no superar ni el peso ni las medidas permitidas por las aerolíneas.

¿Me hará falta el abrigo por si refresca? ¿Echo más ropa interior para un imprevisto? ¿Necesitaré la plancha para el pelo o habrá en el hotel? Son muchas las dudas que se nos agolpan instantes antes de hacer embarcarnos en nuestro viaje y muchas las cosas ‘candidatas’ a venirse con nosotros en nuestra maleta. Para ayudaros a descartar cosas innecesarias hemos elaborado esta pequeña guía.

Estas son las 10 cosas que no deberías llevarte (bajo ningún concepto) en tus viajes:

1. Productos para el baño:

Es cierto que cuando nos aseamos en casa utilizamos numerosos productos para que nos ayuden a lucir de la mejor forma posible. Pero cuando nos vamos de viaje debemos llevarnos lo imprescindible. Champú, acondicionador, gel, crema… De todas estas cosas suelen proveernos los hoteles en los que nos alojamos. Sin embargo, si todavía necesitas llevarte algo en particular acuérdate de echar la cantidad justa y en un bote de plástico de menos de 100 ml. No vayas a tener un disgusto en el control de seguridad del avión. Y si te falta algo, no te preocupes: ¡en tu destino habrá un supermercado donde comprar lo que necesites!

2. Lecturas para el viaje:

Tranquilo, no estamos locos. Sabemos que un libro es uno de los mejores compañeros de viaje. Pero también que hay libros muy pesados y gordos que ocupan un espacio en tu equipaje que te vendría mejor para otras cosas. Si llevas un libro, que sea de un tamaño adecuado. Y si necesitas más, ¿por qué no pruebas con un libro electrónico?

3. Ropa (más de la necesaria):

Éste es el verdadero reto de tus vacaciones: meter en la maleta únicamente la ropa que vayas a necesitar. Piensa bien si en tu destino vas a irte de tiendas, porque si es así deberás llevar hueco libre en tu equipaje. Otra opción es llevarte la ropa más vieja y que puedas tirar para sustituirla por nuevos modelitos comprados durante tus vacaciones. Y recuerda: por mucho miedo que tengas a los cambios de tiempo es muy raro que si vas a las Islas Canarias en agosto necesites un abrigo.

4. Comida:

Si viajas con poco presupuesto puedes echar algo de comida envasada al vacío en tu equipaje, pero te recomendamos que te animes a probar las delicias gastronómicas de tu destino. ¡Nada mejor que descubrir así otras culturas y probar alimentos nuevos!

5. El secador para el pelo:

Salir de la ducha y secarse el pelo es un ritual que casi todas las mujeres siguen al pie de la letra. Y más cuando tienes pensado hacerte muchas fotos. Pero si vas de viaje deberías dejarlo en casa. Primero porque seguramente encuentres un secador en el hotel en el que te alojas; y segundo porque ocupa mucho espacio. ¡Atrévete a desmelenarte durante unos días! Y lo mismo te decimos de la plancha para el pelo.

6. Objetos de valor:

Es cierto que en los hoteles hay cajas fuertes, ¿pero de verdad necesitas llevarte de vacaciones tu reloj más caro? ¿Esos pendientes que llevan pasando en tu familia de generación en generación? Evítate disgustos y déjalos en casa.

7. Toallas:

Al igual que sucede con el secador del pelo, en el hotel encontrarás toallas. Y si a pesar de todo necesitas llevarte una, que sea de tamaño de viaje y de microfibra: son las que menos ocupan y cumplen perfectamente con su función.

8. Objetos prohibidos:

Ni se te ocurra echar en tu maleta petardos, cal viva, herbicida, fusibles, pastillas para encender fuego, bengalas, hachas, baterías húmedas ni ningún otro objeto con el que esté prohibido montarte en un avión. Infórmate bien en tu aerolínea para no presentarte en el aeropuerto con alguna de estas cosas que, por supuesto, se quedarán en tierra.