Translate One2One, el auricular traductor que no necesita conexión a Internet
Como en la película “Lost in Translation” puede resultar ciertamente frustrante encontrarte en un país o con un interlocutor con el que quieres comunicarte y no hablas su idioma. Hace algún tiempo que hay soluciones como Skype, que permiten realizar esta traducción en tiempo real, auriculares creados especialmente para esta función, o incluso puedes intentar comunicarte usando el traductor de Google. Sin embargo, si no tienes conexión a Internet, ninguna de estas herramientas te servirá de nada. Por eso, la compañía australiana Lingmo ha desarrollado el auricular Translate One2One que utiliza inteligencia artificial para realizar la traducción simultánea entre 8 de los idiomas más hablados en el mundo, incluyendo el Chino, Inglés y el Español.
El auricular tarda tan sólo entre 3 y 5 segundos en realizar la traducción y no necesita conexión a Internet para funcionar, de manera que puedes usarlo en un interior sin cobertura, en cualquier zona aislada del mundo y sin necesidad de consumir tu tarifa de datos, depender de la conexión o de llevar el auricular emparejado a tu smartphone, como le sucede a otros dispositivos.
El traductor del One2One emplea la inteligencia artificial de la tecnología Watson de IBM (emplea las API de proceso del lenguaje natural de IBM) junto con las aplicaciones y el hardware de aprendizaje máquina (machine learning) propietarios de Lingmo para realizar la traducción y permitir que dos personas se comuniquen del modo más natural posible sin necesidad de un intérprete.
El precio del auricular es de 180 dólares, aunque el fabricante vende un conjunto de dos unidades por 230 dólares para que puedas llevar un segundo auricular y tener una conversación fluida, y el plazo de envío es de entre 4 y 6 semanas.
En forma de app, por tan sólo 5 euros
Por otro lado, la compañía, también es la artífice de la aplicación Translate4me, que funciona en dispositivos Android e iOS y ofrece una funcionalidad muy similar, tanto usando la voz como escribiendo a modo de chat, aunque en este caso sí requiere de conexión a internet para funcionar (a cambio, el número de idiomas disponible es mucho mayor).