Giro radical en la vida de Alejandro Albalá: fue parte del clan Pantoja y ahora está irreconocible
Alejandro Albalá saltó a la fama a raíz de su relación con Isa Pantoja
El joven concursó en 'Supervivientes' y ahora vive alejado de los medios
Albalá ha experimentado un cambio físico que ha revolucionado a muchos
Jorge Rey revienta el verano y confirma que España no esta preparada para lo que llega: "Fríos fuera..."
Mario Picazo no tiene buenas noticias: lo que llega a España a partir de hoy no es normal

Alejandro Albalá fue un rostro habitual en los medios de comunicación, primero por su relación con Isa Pantoja y más tarde por su participación en algunos concursos. Su nombre se convirtió en sinónimo de polémica, romance televisado y crónica social. En estos momentos, su vida discurre por caminos muy distintos a los que en su día le catapultaron al éxito. Ha emprendido una nueva etapa en la que el gimnasio, el esfuerzo personal y su pequeño negocio son los verdaderos protagonistas. Ha dado un giro de 180º y en OKDIARIO tenemos las pruebas.
Su entrada en la popularidad no fue casual. Allá por 2014, cuando comenzó su noviazgo con Isa Pantoja, su nombre empezó a ocupar titulares. Poco tiempo después, esa relación lo llevó a consolidarse como un habitual de las revistas del corazón. La historia con Isa no solo fue duradera, sino también intensa, con idas y venidas que culminaron en una boda en Cancún en 2016.
Tras esa etapa, Albalá siguió engrosando su currículum sentimental mediático con un romance con Sofía Suescun. Fue entonces cuando su nombre ya estaba completamente ligado al entretenimiento televisivo, consolidándose como participante de realities y tertuliano. Pero mientras otros buscaban perpetuarse en ese ecosistema, Alejandro comenzó a diseñar un plan alternativo. Consciente de que la fama tiene fecha de caducidad, centró su energía en terminar sus estudios y en poner en marcha su propio negocio: un estanco en el madrileño barrio de Carabanchel.
Aunque lleva años alejado de la televisión, Alejandro Albalá ha vuelto a generar interés en redes sociales, pero no por su vida sentimental, sino por su sorprendente transformación física. Nada queda ya de aquel joven delgado y de cuerpo discreto que concursó en Supervivientes.
El cambio físico de Alejandro Albalá
Hoy luce una imagen mucho más atlética y trabajada. Alejandro ha conseguido esculpir su cuerpo a base de ejercicio intenso, disciplina alimentaria y perseverancia. Él mismo lo muestra, sin filtros ni artificios, frente al espejo y desde su teléfono móvil, como queriendo decir: esto lo he logrado yo. Músculos tonificados, abdominales marcados, brazos definidos… su físico actual habla de una dedicación continua y de una rutina bien planificada.
Sus redes sociales son testigo de esa evolución. A menudo comparte imágenes que reflejan su progreso y no son pocos quienes le dedican elogios por su nuevo aspecto. Lejos de ser una moda pasajera o una transformación momentánea, este nuevo Alejandro Albalá parece estar plenamente comprometido con su bienestar físico y mental, manteniéndose alejado de la superficialidad que tantas veces le atribuyeron durante su etapa más mediática.
Durante su relación con Sofía Suescun, el entorno de ella fue muy crítico con Alejandro. Lo tildaron de «mantenido» y le reprocharon su falta de iniciativa profesional. Sin embargo, la realidad ha demostrado que el joven supo reinventarse y construir una vida estable lejos del foco público. Al montar su propio negocio y convertirse en su propio jefe, dejó claro que no necesitaba de ninguna relación para subsistir. Y con su constancia en el deporte ha demostrado tener una capacidad de esfuerzo que muchos pusieron en duda.
La nueva vida de Alejandro Albalá
El Alejandro Albalá que hoy vemos tiene poco que ver con aquel veinteañero que protagonizaba portadas por su noviazgo con la hija de la tonadillera. La experiencia, los reveses y la madurez han hecho de él una persona más centrada, menos impulsiva y decidida a vivir bajo sus propios términos.
No obstante, Alejandro no ha cortado del todo el cordón con el mundo televisivo. Es habitual que algunos programas recurran a él cuando el clan Pantoja vuelve a estar en el centro del huracán mediático, y él accede en contadas ocasiones. También ha sido protagonista involuntario de otras polémicas más recientes, como la que tuvo con Claudia Bavel. Esta joven, conocida por su contenido en redes y sus relaciones con personajes famosos, lo mencionó como uno de los hombres que pasaron por su vida. El asunto generó revuelo durante unos días, pero Albalá optó por no alimentar el fuego.
Poco queda del muchacho que, con apenas 20 años, se vio envuelto en una relación tan mediática como conflictiva. Su historia con Isa Pantoja fue tan intensa como inestable. Se conocieron en Cádiz, cuando él era apenas el hermano de una amiga de Isa. Lo suyo fue inmediato y pasional, y aunque vivieron varias rupturas, siempre volvían. Hasta que decidieron casarse. Aquel enlace en Cancún, sin familiares ni testigos, simbolizaba más una huida que un compromiso sólido.
Pese a todo, Alejandro no reniega de aquel capítulo. Aún hoy asegura tener cariño por Isa y guarda recuerdos de aquellos años. Pero también es evidente que ha pasado página. El hombre en el que se ha convertido ha tomado decisiones distintas, ha apostado por un estilo de vida más saludable y ha aprendido a vivir sin depender de los focos de Telecinco.
Temas:
- Famosos
- Isa Pantoja