El 34% de los mayores de 55 años españoles contemplan el coliving como una opción deseable
Los sénior españoles tienen más de un ingreso en su hogar (uno de cada dos), ayudan a sus familiares (cuatro de cada diez) y tienen capacidad de ahorro (uno de cada dos). Y, además, un dato sorprendente: el coliving es el modelo alternativo más aceptado, un 34% lo ve como una opción deseable.
Así lo manifiesta el II Barómetro de Consumidor Sénior de Mapfre elaborado en octubre de 2021 –por primera vez con la ayuda de Google– permite conocer los hábitos de los más 15 millones de españoles que superan los 55 años. La realidad puesta de manifiesto en este estudio se aleja de los negativos clichés sobre esta cohorte de edad y ayuda a acabar con el preocupante edadismo.
En cuanto a la vivienda, estas personas son propietarios (ocho de cada diez), no quieren cambiar de casa (seis de cada diez) y son optimistas respecto al futuro (seis de cada diez) aunque creen que sus gastos de vivienda y energía aumentarán (seis de cada diez).
Al mismo tiempo cuidan de su salud a través de la alimentación (siete de cada diez), viajan habitualmente (siete de cada diez) y son minoría los que visitan el médico habitualmente (uno de cada diez). La mayoría está en internet (seis de cada diez), usa el comercio electrónico (cuatro de cada diez) y está informada en mayor proporción que otros grupos de edad especialmente en todo lo que tiene que ver con la sostenibilidad.
Sobre el ahorro
Los porcentajes de ahorro entre los sénior que sí lo hacen son estables, siendo predominante los que ahorran entre un 10% y un 30%. A pesar de la crisis, un 64% (60% en 2020) no cree que su situación económica vaya a empeorar a partir de ahora.
Tampoco la crisis sanitaria y económica ha alterado la base de su consumo. Según el análisis, 1,66 personas de media aportan ingresos, el 28% paga hipoteca o préstamos, mientras que el 24% tiene algún plan de pensiones contratado y 98% tiene algún seguro contratado.
Ayudan a sus familiares y personas cercanas económicamente
La ayuda económica aumenta en función del tamaño de hábitat y nivel de estudios. Por ello, el 67% de estas ayudas se produce todos los meses, siendo un 28% situaciones de dependencia. En detalle, cabe destacar que el 43% ayuda económicamente a algún miembro de su círculo más cercano.
También sienten que en el caso de la vivienda, y así lo arroja el estudio, que los mayores gastos están en el pago del hogar y los gastos de energía, superando a la alimentación, un punto que en 2020 estaba por encima. Pero, además, creen que la tendencia se acentúa a futuro, ya que un 58% piensa que gastará más en vivienda y energía el año que viene.
Con respecto a la vivienda, también afirman que no hay intención de cambiar de casa. La pandemia ha aumentado significativamente el número de indecisos (+15%), especialmente entre los menores de 60 años. El coliving es el modelo alternativo más aceptado, un 34% lo ve como una opción deseable.
Han viajado menos en 2021, pero viajarán
Antes de la pandemia, un 82% viajaba por ocio o turismo todos los años, aunque este año lo ha hecho hasta el 69%. Se prevé una recuperación de cara a 2022, especialmente los viajes nacionales intercomunitarios (63%).
Sin embargo, y a pesar del momento pandémico que atraviesa el mundo, ellos lo tienen claro: el 85% de los mayores de 55 años planea viajar el próximo año.
En el espacio laboral, estos mayores de 55 años no se sienten valorados, por ello al menos 9 de cada 10 planean jubilarse pasados los 40 años. En concreto, un 87% no siente que se valore su experiencia y conocimientos. Un 58% se ha jubilado o piensa que se jubilará en el momento deseado; pero sólo el 15% empezó a preparar la jubilación antes de los 40 años.
Dejan de consumir marcas que no son éticamente responsables
Creen, además, que las empresas deben liderar la transición a un modelo más sostenible. Apuntan que los bancos y aseguradoras deberían dar un trato preferencial a empresas y proyectos que promuevan la sostenibilidad ambiental y social, pero, además, según este análisis, estas personas han dejado de consumir marcas que no son éticas en sus comportamientos 56% medioambientales y sociales y está dispuesto a gastar más en el carro de la compra por el bien del planeta.