Qué es la neurología funcional que puede aliviar la intolerancia a la lactosa

Los síntomas más comunes de la intolerancia a la lactosa incluyen diarrea, gases e, incluso, vómitos en casos más graves

Intolerancia a la lactosa
La neurología funcional que puede aliviar la intolerancia a la lactosa
Diego Buenosvinos
  • Diego Buenosvinos
  • Especialista en periodismo de Salud en OKDIARIO; responsable de Comunicación y Prensa en el Colegio de Enfermería de León. Antes, redactor jefe en la Crónica el Mundo de León y colaborador en Onda Cero. Distinguido con la medalla de oro de la Diputación de León por la información y dedicación a la provincia y autor de libros como 'El arte de cuidar'.

Fact checked

×

Este artículo de OkSalud ha sido verificado para garantizar la mayor precisión y veracidad posible: se incluyen, en su mayoría, estudios médicos, enlaces a medios acreditados en la temática y se menciona a instituciones académicas de investigación. Todo el contenido de OkSalud está revisado pero, si consideras que es dudoso, inexacto u obsoleto, puedes contactarnos para poder realizar las posibles modificaciones pertinentes.

Un estudio de NeuroReEvolution, en colaboración con La Universidad Europea, ha demostrado que la neurología funcional puede aliviar significativamente los síntomas de la intolerancia a la lactosa, una condición que afecta a millones de personas en todo el mundo.

La investigación, en la que participó el profesor de Nutrición Vicente Javier Clemente Suárez, analizó el efecto de esta técnica innovadora en un paciente que había experimentado síntomas severos de intolerancia a la lactosa durante años.

Los síntomas más comunes de la intolerancia a la lactosa incluyen diarrea, gases e, incluso, vómitos en casos más graves. Este trastorno se produce por la incapacidad del cuerpo para digerir la lactosa, un azúcar presente en los productos lácteos, debido a niveles insuficientes de lactasa, la enzima que descompone la lactosa en el intestino. «A pesar de que los tratamientos más comunes son cambios en la dieta y el uso de suplementos, muchas personas siguen sufriendo de síntomas incómodos», explica Clemente.

El estudio investiga el uso de la neurología funcional como una alternativa prometedora para tratar la intolerancia a la lactosa. Esta terapia combina principios de la neurología tradicional con un enfoque integral que busca mejorar la comunicación entre el sistema nervioso y el cuerpo. En lugar de centrarse solo en los síntomas digestivos, la neurología funcional también considera cómo los problemas neurológicos pueden afectar la capacidad del organismo para procesar la lactosa.

Durante una sesión de neurología funcional, un terapeuta evalúa el funcionamiento del sistema nervioso del paciente. A través de pruebas específicas, se pueden identificar desequilibrios que contribuyen a los síntomas de intolerancia a la lactosa. El tratamiento puede incluir ejercicios físicos, técnicas de estimulación sensorial y corrección de reflejos, todos diseñados para restablecer la función neurológica.

Este enfoque tiene como objetivo normalizar las respuestas del cuerpo a los alimentos, ayudando a los pacientes a digerir la lactosa de manera más efectiva ya reducir los síntomas asociados. «Aunque el estudio ha mostrado resultados prometedores, como una disminución de episodios de diarrea y dolor abdominal, los análisis bioquímicos del paciente aún muestran signos de malabsorción de lactosa. Esto indica que, si bien la terapia puede mejorar la calidad de vida al reducir síntomas, se necesita más investigación para entender completamente su efectividad», comenta el experto de la Universidad Europea.

El profesor Clemente destaca que, aunque los resultados clínicos son talentosos, es crucial llevar a cabo más estudios con un mayor número de pacientes y un seguimiento a largo plazo. «Aún hay mucho por investigar. Es importante entender cómo integrar esta terapia de manera efectiva en el tratamiento de la intolerancia a la lactosa», afirma.

Según los autores, este enfoque innovador de la neurología funcional podría ser especialmente beneficioso para aquellos pacientes que no han encontrado alivio con tratamientos tradicionales, como dietas sin lactosa o suplementos de lactasa. Al combinar un tratamiento neurológico con cambios en la alimentación, se abren nuevas posibilidades para abordar tanto los síntomas inmediatos como las causas subyacentes de esta afección, ofreciendo esperanza a millones de personas que padecen intolerancia a la lactosa.

Lo último en OkSalud

Últimas noticias