Médicos advierten sobre las secuelas del coronavirus
Tras el paso del coronavirus, en algunos pacientes es frecuente encontrar secuelas. ¿Cómo serían estas secuelas y en qué casos se producen?


Fact checked
Este artículo de OkSalud ha sido verificado para garantizar la mayor precisión y veracidad posible: se incluyen, en su mayoría, estudios médicos, enlaces a medios acreditados en la temática y se menciona a instituciones académicas de investigación. Todo el contenido de OkSalud está revisado pero, si consideras que es dudoso, inexacto u obsoleto, puedes contactarnos para poder realizar las posibles modificaciones pertinentes.
Según Peter Openshaw, un profesor y médico clínico inglés, los pacientes que se recuperan de coronavirus pueden sufrir secuelas de por vida. Estas conclusiones fueron confirmadas por especialistas del Servicio Nacional de Salud de Gran Bretaña, quienes han observado fibrosis pulmonar y daños al sistema nervioso, entre otras dolencias. El profesor, que trabaja en inmunología pulmonar, especialmente en defensa contra infecciones virales, advierte sobre estos posibles efectos tras la recuperación de los infectados.
Posibles secuelas del coronavirus
Los pacientes de la UCI que se curan de la infección por COVID-19 necesitan un año para recuperarse, dice el profesor. Pero no excluye que algunos de ellos mantengan secuelas de por vida. Algunas de ellas pueden ser:
Capacidades reducidas
El 50% de las personas recuperadas pueden ver reducidas sus capacidades físicas, cognitivas o mentales.
Fibrosis pulmonar
Según los especialistas, uno de cada tres pacientes pueden desarrollar fibrosis pulmonar, una afección en la que forma en los pulmones tejido cicatricial, lo cual afecta la función respiratoria y provoca una saturación de oxígeno deteriorada en la sangre.
Daño cardíaco agudo
Siguiendo datos de China, el virus se encuentra en la sangre en el 36% de los pacientes, pero el virus entra a las células a través del receptor ACE2, el que es abundante en las células del corazón. Por ello, directa o indirectamente, puede causar problemas cardiovasculares a largo plazo.
Consecuencias psiconeurológicas del coronavirus
Un estudio reciente realizado en la Universidad de California, ha concluido que la COVID-19 podría causar enfermedades psiconeurológicas en el futuro.
Aunque estas observaciones se basan en evidencias de epidemias anteriores, el SARS-COV-2 ya ha causado afecciones agudas relacionadas con un mal funcionamiento del sistema nervioso.
Trastorno delirante, Alzheimer
Los expertos del Reino Unido afirman que el 70% de los pacientes de las personas recuperadas pueden sufrir un trastorno delirante. También han observado un aumento del riesgo de desarrollar Alzheimer.
En las epidemias pasadas también se observaron daños similares después de la recuperación de las personas infectadas.
Otras patologías como secuela
Tras la gripe española en el año 1918, se observaron una gran cantidad de casos de encefalitis letárgica, y después del síndrome respiratorio de Medio Oriente, el SARS y la gripe porcina aumentaron los casos de encefalitis, narcolepsia y el síndrome de Guillain-Barré, así como otras enfermedades neuromusculares.
Los médicos recalcan que estos daños y secuelas del COVID-19 no se presentan en todos los casos y que es necesario esperar más estudios que confirmen cuáles son las posibles derivaciones de la infección.
Los pacientes que se recuperan y salen de la Unidad de Cuidados Intensivos son quienes presentan más riesgo. También son los que mayores cuidados deben tomar para cuidar su salud y evitar una posible reinfección, la que hasta el momento no se ha descartado.
Advierte a todos sobre estas posibles secuelas del COVID-19. Comparte y comenta esta noticia.
Temas:
- Coronavirus