Componentes de la soja reducen las recaídas en cáncer de mama

Los compuestos llamados isoflavonas están entre los derivados de plantas que pueden ayudar a reducir el riesgo de recaídas y mejorar la supervivencia en pacientes con cáncer de mama

5 beneficios de la soja que desconocías

soja
Los compuestos llamados isoflavonas están entre los derivados de plantas que pueden ayudar a reducir el riesgo de recaídas y mejorar la supervivencia en pacientes con cáncer de mama.

Fact checked

×

Este artículo de OkSalud ha sido verificado para garantizar la mayor precisión y veracidad posible: se incluyen, en su mayoría, estudios médicos, enlaces a medios acreditados en la temática y se menciona a instituciones académicas de investigación. Todo el contenido de OkSalud está revisado pero, si consideras que es dudoso, inexacto u obsoleto, puedes contactarnos para poder realizar las posibles modificaciones pertinentes.

Las isoflavonas son unos elementos de la soja que pueden ayudar a reducir de forma significativa las recaídas del cáncer de mama y mejorar la supervivencia, de acuerdo con los resultados de un nuevo estudio firmado por expertos de la Universidad Johns Hopkins (Baltimore, Estados Unidos). Su trabajo es un meta-análisis: Han repasado las conclusiones de los estudios científicos más relevantes y rigurosos publicados sobre la cuestión para extraer conclusiones generales. Sus resultados se han dado a conocer en la revista NCI Cancer Spectrum.

En el trabajo han colaborado expertos de Australia, Dinamarca, Inglaterra, Noruega y Estados Unidos, que han analizado 22 estudios publicados sobre el impacto del consumo de alubias de soja y otros vegetales con nutrientes de este tipo (incluido el té verde) en las recaídas del cáncer de mama después del tratamiento y en la mortalidad por esta causa, así como en el fallecimiento por cualquier otro motivo.

El consumo de isoflavonas de soja se asoció con una reducción del 26% del riesgo de que el cáncer volviera a presentarse después de la terapia. Contando todos los estudios incluidos, los autores llegaron a esa conclusión observando los datos sanitarios de 11.837 mujeres.

Los resultados eran más notorios cuando el análisis se realizaba en mujeres que habían superado un cáncer después de la menopausia, y la mayor reducción del riesgo se dio en quienes consumían 60 miligramos diarios de isoflavonas. Eso equivale a tres raciones al día: una en una taza de leche de soja, 85 gramos de tofu y media taza de alubias de soja.

No obstante, el efecto de consumir soja en el riesgo de mortalidad no fue tan marcado, llegando solamente al 12%, y no se consideró estadísticamente significativo. Se vio sobre todo en personas que consumían entre 20 y 40 miligramos al día, una o dos raciones.

El papel de la enterolactona

Otra de las conclusiones de este estudio tiene que ver con la enterolactona, un compuesto que se metaboliza por los lignanos. Los lignanos se encuentran en gran variedad de plantas, incluyendo semillas, frutos secos, legumbres, cereales integrales, frutas y verduras.

La enterolactona reduce el riesgo de mortalidad por cáncer de mama en un 28% y el de mortalidad por cualquier causa en un 31%. De nuevo, la asociación es más estrecha para las mujeres que han pasado la menopausia (35% de reducción en la mortalidad por cualquier causa).

En este caso los científicos no pudieron calcular las cantidades que consumía cada persona porque las bacterias del intestino que metabolizan estos compuestos son diferentes de una persona a otra.

Diana van Die, de la Universidad de Sydney (Australia) ha explicado que el grado de certeza científica de estas conclusiones es «probable», lo que significa que hay indicios potentes de la contribución de estos nutrientes a los mejores resultados en salud.

Channing Paller, de la Universidad Johns Hopkins, autor principal, considera que este estudio muestra la importancia de estudiar a fondo estos compuestos y las dosis específicas que ofrecen mayores beneficios. «Es lo que los pacientes están buscando», apunta.

Lo último en OkSalud

Últimas noticias