4 consejos para que no dejes los entrenamientos por la falta de motivación

Tanto si buscamos evolucionar en los entrenamientos como mejorar el aspecto de nuestro cuerpo, lo más importante es la constancia. De ahí la importancia de la motivación, de las ganas de acudir con regularidad al gimnasio. Resulta mucho más fácil de lo que piensas abandonar un deporte por la falta de ganas. Por eso te damos 4 consejos para que no dejes los entrenamientos por la falta de motivación.

Hay ciertas personas que no están acostumbradas a la práctica deportiva y a los que les cuesta mucho más entrenar. Siempre encuentran alguna excusa para no asistir a las clases del gimnasio. Es posible que el aburrimiento sea el principal responsable de todo esto, por lo que intentaremos no caer en la monotonía.

Mantener el interés

Es necesario que mantengamos en todo momento el interés por la práctica del ejercicio. Para ello intentaremos marcarnos unas metas a medio-largo plazo que sean asequibles. En ocasiones esta falta de motivación viene dada por los objetivos tan ambiciosos que nos fijamos y que resultan casi imposibles de conseguir. Un claro ejemplo es cuando te propones realizar un maratón en cuestión de meses y de momento no has sido capaz de realizar una carrera de diez kilómetros. Hay que ir en progresión, para ir de menos a más.

Mantener las costumbres

Las personas que adquieren un hábito y que realizan ejercicio con frecuencia suelen ser más reacios a dejarlo. Es importante llevar un estilo de vida saludable y ser constantes en todo aquello que se realice. De un día para otro no se pueden conseguir los resultados que buscamos, por eso la importancia de buscar un deporte que nos agrade mucho y en donde nos encontremos muy cómodos. Así estarás más animado y te costará caer en el aburrimiento, sobre todo en el gimnasio.

Romper con la monotonía

Hacer siempre lo mismo puede ser lo más desmotivante del mundo. Tenemos a nuestro alcance un gran número de técnicas de entrenamiento, así que cada día se puede jugar con una nueva. Es importante que innovemos. A la hora de ejercitar una parte del cuerpo existen muchas formas de entrenarla. Lo más adecuado es que no se repitan las técnicas un día tras otro e incorporemos nuevos métodos. De esta manera evitarás dejar el gimnasio antes de lo que pensabas.

El deporte como obligación

En realidad nadie te obliga a realizar un deporte como castigo o como una obligación. Procura escoger una disciplina que te resulte agradable y en la que te encuentres a gusto. Intenta que se adapte a tu estilo de vida o condiciones físicas y no al revés. El ejercicio físico tiene que ser una válvula de escape para huir de todos los problemas y tensiones que acumulamos en el día a día. El tiempo que pasemos haciendo deporte nos servirá para conocernos más a nosotros mismos y en ocasiones aprenderemos mucho más sobre el cuerpo y las lesiones. Apúntate a una actividad que te guste y no lo hagas porque un amigo también esté inscrito en ella. Piensa en tus necesidades.