Tezanos se cree Ferran Adrià y se pasa de cocina
A José Félix Tezanos se le ha pasado el punto de cocción en el último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS). El director de la institución demoscópica se ha creído Ferran Adrià, pero lo cierto es que su cocina dista mucho de elaborar productos merecedores de alguna estrella Michelin. Muy al contrario, la victoria del PSOE con un 29,9% de los votos en unas hipotéticas elecciones generales es del todo inverosímil. Entre otras cosas, porque esta encuesta no tiene en cuenta algo fundamental para entender el contexto político actual de España: la fuerte irrupción de Pablo Casado como nuevo presidente del Partido Popular.
Casado ha aglutinado a las distintas corrientes del principal partido de centroderecha. Una unión perdurable, ya que está basada en los principios que hicieron grande al PP. Los de Génova 13 vuelven a navegar en un trasatlántico de la política. Ahora, el PSOE no sólo se enfrenta al buen hacer gestor que ha caracterizado a su máximo rival en los últimos años, sino que tiene en frente a un líder político que encarna la renovación de la corriente de pensamiento y voto preponderante en España y, por ende, un estímulo para los votantes desencantados que, en su mayoría, volverán a confiar en el PP tras la victoria de Casado en las Primarias. Por lo tanto, Tezanos confunde deseo con realidad como ya hiciera en 2015 cuando vaticinó un respaldo de entre el 29 y el 32% para el PSOE y Sánchez sacó los peores resultados de la formación. No coló entonces y no cuela ahora.
Hay que tener en cuenta que Pedro Sánchez ha sumido al país en la inquietud en varios frentes. De una parte, su relación permisiva con los separatistas vascos y catalanes denota la debilidad de su Gobierno y la dependencia del apoyo de los que quieren subvertir nuestro orden constitucional. Por otro lado, la crisis migratoria —provocada por su propia irresponsabilidad— y la del taxi exponen la falta de diligencia del Gobierno a la hora de solucionar problemas inesperados. Además, mientras todo esto ocurre, se han enredado en casos de política cosmética como la exhumación del dictador Francisco Franco del Valle de los Caídos mientras no se cansan de anunciar subidas de impuestos. Con semejante inventario, y con el fortalecimiento del Partido Popular, cuesta mucho trabajo creer en la última encuesta del CIS.