Sánchez vuelve a la España de la dictadura y se plantea intervenir el mercado

Pedro Sánchez vuelve a la España de la dictadura y se plantea intervenir el mercado

Pedro Sánchez se plantea seriamente la posibilidad de topar los márgenes empresariales en los productos de la cesta de la compra para tratar de contener la inflación, una vez comprobado que su medida de reducir el IVA de algunos productos básicos ha sido un rotundo fracaso, por mucho que la ministra de Economía, Nadia Calviño, haya descubierto un supermercado donde los precios han bajado. O sea, que Sánchez compra la propuesta podemita de intervenir el mercado, el recurso clásico del populismo comunista. En lugar de rebajar el IVA a productos como la carne o el pescado, cuyo precio es tan alto que sí se notaría sustancialmente la bajada de impuestos, el presidente del Gobierno parece dispuesto a hacer lo menos recomendable: una vuelta a la España de la dictadura en la que el Estado controlaba los precios.

La diferencia es que por entonces el aislamiento de España obligaba a medidas de esta naturaleza, pero en una economía globalizada, sujeta a las leyes de la oferta y la demanda, lo que pretende el Gobierno no tiene precedentes en ninguna economía occidental. Nada que ver con Francia, donde los actores de la cadena alimentaria han llegado a un acuerdo por el cual son los propios supermercados los que han tomado la iniciativa.

Con las elecciones municipales y autonómicas a la vuelta de la esquina, el precio de la cesta de la compra es una soga al cuello de Pedro Sánchez, que se guarda una bala en la recámara: intervenir el mercado al modo de Cuba o Argentina. En lugar de aplicar el sentido común, Sánchez se plantea comprar la receta de Podemos en un desesperado intento de invertir el curso de las encuestas. Pura demagogia de un Ejecutivo desbordado por la realidad económica. Sánchez no acierta con la tecla y después de oponerse al plan de sus socios de Gobierno, parece dispuesto ahora a copiarles la idea.

Lo último en Opinión

Últimas noticias