Condenado el sicario Mohamed por el brutal asesinato de un joven al que confundió con otro en Algeciras

Yousef Mohamed Lehrech, conocido como El Pastilla ha sido declarado culpable del asesinato de un joven de 26 años en Algeciras por un jurado popular, que ha emitido un veredicto firme tras más de siete horas de deliberación. El crimen ocurrió el 13 de octubre de 2022 en la barriada de El Saladillo, cuando la víctima, J.F.A., fue tiroteada a quemarropa tras ser confundida con un miembro de una banda rival. El joven asesinado no tenía relación alguna con el narcotráfico ni con grupos criminales.

Los hechos ocurrieron a las 21:30 horas de aquel día, cuando el acusado, acompañado de al menos otra persona, se aproximó a la víctima en una motocicleta. Llevaban ropa oscura, cascos integrales y actuaron con absoluta frialdad. Uno de ellos disparó en cuatro ocasiones contra J.F.A., que recibió dos impactos mortales. El crimen fue planeado, y así lo ha considerado el jurado, que ha apreciado la alevosía, el uso de disfraz y la ausencia total de posibilidad de defensa por parte del joven asesinado.

La Fiscalía y las acusaciones particulares han solicitado una pena de 25 años de prisión para Lehrech por un delito de asesinato. Además, reclaman más de 500.000 euros en concepto de indemnizaciones para los padres y hermanos de la víctima, que desde el primer momento han sostenido que su hijo fue ejecutado sin motivo alguno.

Según la investigación, dirigida por la UDYCO de Algeciras, El Pastilla actuó como sicario bajo las órdenes de Rachid B.F., alias Tayena, presunto líder de una organización criminal vinculada al narcotráfico en el Campo de Gibraltar. La orden era acabar con un rival, pero se equivocaron de objetivo. Tras el crimen, Lehrech huyó del país y fue localizado meses después en Alemania, donde fue detenido gracias a una orden europea de detención. Fue extraditado y se encuentra desde entonces en prisión preventiva.

Este veredicto llega mientras El Pastilla espera juicio por otro crimen: el asesinato del propio Tayena, ocurrido en Ceuta meses después del crimen de Algeciras. Se sospecha que el joven sicario habría matado también a su antiguo jefe por motivos internos relacionados con ajustes de cuentas en el entorno del narcotráfico.

El asesinato de J.F.A. generó una gran conmoción en Algeciras, especialmente en el barrio de El Saladillo, donde era conocido por su carácter tranquilo. La familia ha asistido a todo el juicio y ha reclamado justicia hasta el final. El veredicto de culpabilidad marca un paso importante en una investigación compleja que ha puesto al descubierto las ramificaciones de las bandas criminales que operan en el sur de España.