Sánchez sopesa copiar la idea podemita de limitar los beneficios de los súper antes de las elecciones
Defiende la propuesta de los sindicatos para conocer los márgenes empresariales durante la negociación colectiva
El impuestazo de Podemos a los supermercados costará 385 millones a Mercadona, Carrefour y Lidl
Otro ranking de la vergüenza: los precios aumentan en España el doble que en Portugal o Alemania
Pedro Sánchez retoma la idea podemita de limitar los beneficios de los supermercados como respuesta a la subida de precios que están sufriendo los alimentos, ya que sus medidas adoptadas hasta ahora no están funcionando. Un gesto que el líder del PSOE sopesa lanzar antes de las elecciones municipales y autonómicas del mes de mayo, con el fin de captar votos entre los sectores más vulnerables en plena escalada del precio de la cesta de la compra. Los socialistas analizan también la fórmula para limitar los beneficios empresariales de otros sectores.
Los morados reclamaron en diciembre extender el impuestazo sobre bancos y energéticas también a los supermercados durante la prórroga de las medidas del decreto anticrisis. Un decreto que la coalición tendrá que renovar en junio y que Sánchez prevé ampliar y anunciar durante la moción de censura. Ahí podría dar el paso de intervenir sobre los beneficios de los súper, aunque está por ver cómo. Podemos planteó en su día un nuevo impuesto del 33% a los beneficios extraordinarios de los grandes supermercados.
Este miércoles, en una conversación informal con los periodistas desplazados a Lanzarote, el jefe del Ejecutivo abrazó la idea que rechazó en su momento a los socios minoritarios. Aunque admitió que su gabinete no sabe «cómo hacer» para limitar los beneficios de los supermercados, por lo que recurrió de nuevo al consenso del diálogo social para garantizar la redistribución de la riqueza. En concreto, afirmó, «situando la negociación colectiva en el centro» para una «mayor transparencia». Y con el pacto de rentas que desde hace meses negocia Moncloa como referencia.
Sánchez apuesta por dar voz a los sindicatos en la reforma que permita alcanzar un consenso para que los empresarios vean limitados sus beneficios. En este sentido calificó de «propuesta muy interesante» la realizada por UGT y CCOO de «incorporar transparencia» en el proceso de la negociación colectiva para «que se conozca cuál es la evolución de los márgenes empresariales, los salarios…». «Es importante lo que estamos haciendo, decirle a la patronal que se tiene que sentar a negociar» señaló.
Sin embargo, tras reunirse con el primer ministro portugués, cuyo gabinete estudia también desde hace unos días imponer límites temporales a los márgenes de beneficio de los distintos agentes del proceso de producción, distribución y venta, similares a los límites aplicados a las mascarillas y pruebas de Covid-19, Sánchez pidió «no hacer comparaciones», ya que son mercados diferentes. Añadiendo que la distribución en Portugal «no es la misma que en España», aunque en nuestro país los precios aumentan el doble que en el país vecino.
«Las soluciones, dadas las diferencias que hay en la estructura económica en cada país, son necesariamente distintas o acopladas a la realidad de cada país», señaló el presidente español. Aun así, el líder del PSOE aseguró que el Gobierno español tiene la «máxima empatía» y aprende de todos los gobiernos para tratar de rebajar la curva de la inflación. Por lo que se fijarán en las decisiones que adopten otros gobiernos de cara a la solución española a la subida de los precios.
Culpa al cambio climático
Aunque Sánchez admitió el aumento del IPC de los alimentos en febrero, según él no se debe sólo al impacto de la guerra de Ucrania, sino también a la meteorología, que ha provocado la caída de producción de algunos alimentos. «Tenemos que ser conscientes de que la subida del precio de los alimentos no sólo es producto de la guerra en Ucrania, sino que el cambio climático y la meteorología hace que la producción de alimentos sea inferior, reduciendo la oferta y subiendo los precios», manifestó el presidente del Gobierno en la comparecencia junto al primer ministro de la República Portuguesa, António Costa, tras la reunión plenaria de las delegaciones española y portuguesa en el marco de la XXXIV Cumbre Hispano-Portuguesa.
Rebaja del IVA
La idea de Sánchez deja en evidencia que la rebaja del IVA de la cesta de la compra no la están notando los ciudadanos. Aunque la vicepresidenta primera Nadia Calviño dijera en el Congreso, el pasado mes de febrero, que ella compraba más barato gracias a la medida impulsada por su gabinete y que no notan el resto de españoles. «La compra de mi casa ya refleja esa bajada de los precios. Es cierto que, como todos los españoles, yo busco las ofertas y compro la fruta de temporada y he visto que en aquellos productos en los que ha bajado el IVA, han bajado los precios. Y esa es la información que nos transmiten también los grupos de distribución», aseguró Calviño.