Trucos para que el perro deje de tirar la correa

La mayoría de los propietarios anhelan que sus mascotas se comporten de manera ejemplar desde el primer paseo, pero los perros requieren un entrenamiento adecuado. A menudo, las personas carecen de conocimiento sobre cómo lograrlo, lo cual no es motivo de desesperación ni de angustia. Siguiendo algunos trucos simples, es posible enseñar rápidamente al perro a no tirar de la la correa durante los paseos.

Aunque algunos ejemplares aprenden más rápido que otros, la disciplina por parte de los humanos es requisito indispensable. Las normas tienen que ser claras e inamovibles y esto no solo incluye las salidas, abarca toda la convivencia familiar. De lo contrario, los animales se comportarán de forma errática.

¿Qué correa elegir?

Al seleccionar una correa para tu perro, es fundamental considerar varios aspectos importantes. Debes tener en cuenta el tamaño de tu mascota, incluyendo su peso, altura y longitud.

El comportamiento del perro también influye en la elección de la correa. Si tu perro es dócil y obediente, tienes más opciones disponibles, pero si muestra tendencias agresivas o tiende a escaparse durante los paseos, es crucial contar con una correa que proporcione un control adecuado.

Además, es esencial considerar el propósito de la correa antes de comprarla. Si es para entrenamiento, paseos largos en el parque o bosque, o si necesitas una correa específica para la educación del perro.

Cuanto más temprano, mejor

La educación de una mascota comienza desde el primer día. Durante su etapa de cachorro, absorben la mayoría de los hábitos que mantendrán a lo largo de su vida, por lo que es crucial garantizar que todas sus experiencias sean positivas.

Aunque aún no esté listo para salir de casa, lo cual sucederá una vez que haya completado su primera serie de vacunas, se pueden practicar ciertas rutinas. Esto incluye familiarizarlo con el collar y la correa, así como introducirlo gradualmente a las caminatas.

Detenerse ante el primer tirón

Es una medida irrenunciable. Para que el perro deje de tirar la correa, quien lo lleva de paseo debe detenerse en el acto. No se puede reanudar la marcha hasta que la tensión haya cesado por completo. Si el can insiste en imponer condiciones, entonces la opción es girar 180° y caminar en dirección contraria de vuelta a casa.

Durante la etapa de aprendizaje lo mejor es elegir rutas no muy transitadas o salir durante horas con poca afluencia. Reducir los estímulos es lo importante, no hay que olvidar que se trata de ‘niños’ y que todo lo que ven es nuevo.

Con ejemplares de razas grandes, los arneses anti tirones son excelentes aliados. Cuando el can quiera ir más rápido de lo que tiene permitido, terminará girando sobre su propio eje y de frente a su dueño. Con ello entenderá que esas no son las maneras.

El refuerzo positivo es laclave

Los premios son eficaces en todas las labores de adiestramiento canino. Durante los paseos, llevar un snack que sirva para celebrar los buenos comportamientos es un truco infalible.

Por el contrario, los regaños, gritos o molestarse con el animal no son medidas útiles. El can terminará estresado y confundido. Del mismo modo, los collares con púas no son opciones a considerar. Enseñar por medio del dolor solo servirá para que la mascota le tenga miedo a su dueño, se convierta en un perro temeroso y su dueño no disfrute de muchas de las cosas que ofrece la gracia natural del animal.

La paciencia es otro requisito indispensable. Quienes esperan que sus perros entiendan todo a las primeras, mejor que opten por una mascota virtual. Es una cuestión de tiempo, de refuerzos positivos y de dejar que nuestro perro vaya asimilando las cosas.