¿Por qué la miel se considera un antibiótico natural?

Desde la antigüedad, la miel ha sido considerada como un alimento con múltiples propiedades especialmente cuando se trata de curar resfriados o también, aliviar dolores de garganta. Os hablamos ahora de la miel y el porqué está considerada como un antibiótico natural.

¿Por qué la miel se considera un antibiótico natural?

Tomar una cucharada con miel o beber un poco de leche caliente con miel puede ayudar como decimos, para aliviar un resfriado, pero no solo eso. Este dulce alimento que proviene de las abejas, sirve también, aplicada directamente, contra  heridas y quemaduras, y  también se puede usar en pieles irritadas, así como usarse contra la acidez de estómago o cuando tenemos problemas con la garganta y el tracto respiratorio (especialmente, en este caso , miel balsámica).

Todo esto porque la miel tiene propiedades antisépticas y antibacterianas y se considera un antibiótico natural desde hace años, aunque ahora existe además, evidencia científica.

Miel antibiótica también según la ciencia

Un estudio publicado en el International Wound Journal y realizado en la Universidad de Lund mostró que la miel contiene 13 bacterias del ácido láctico que producen una acción antimicrobiana basada en el tipo de bacteria a combatir. Los investigadores trataron 42 patógenos de heridas de 22 pacientes con las 13 bacterias de ácido láctico en la miel y lograron efectos similares a los obtenidos con los antibióticos convencionales.

Otra investigación realizada por investigadores de la Universidad de Amsterdam reveló el verdadero secreto de las propiedades antisépticas de la miel: es la defensina-1 , una proteína que está presente en el sistema inmunológico de las abejas y que también se encuentra en la miel. Los científicos lo están estudiando porque creen que en el futuro podría resultar crucial en la creación de nuevos medicamentos que también puedan combatir infecciones resistentes a los antibióticos tradicionales.

El efecto de la molécula se ve reforzado por la alta concentración de azúcar, por el pH ácido y por una enzima, la gluco-oxidasa, que en el agua se convierte en peróxido de hidrógeno que es notoriamente un excelente desinfectante. Por supuesto, es bueno subrayar que la miel normal no puede sustituir a un tratamiento antibiótico , pero sin duda es un aliado perfecto para prevenir numerosas dolencias y como ya hemos dicho, proteger el sistema inmunológico.

La peculiaridad de la miel de Manuka

Entre los diferentes tipos de miel, cuando se habla de las propiedades antibacterianas de la miel, se suele mencionar la miel de Manuka , que tiene un alto contenido de metilglioxal, que es el compuesto del que dependen las propiedades antimicrobianas de la miel. Es particularmente eficaz en el caso de problemas como gingivitis, úlceras, heridas y lesiones cutáneas. También es excelente como prebiótico, porque promueve el crecimiento de microorganismos intestinales.

Se produce principalmente en Nueva Zelanda y Australia a partir del néctar del árbol Manuka, que le da nombre. El metilglioxal también fue descubierto en Nueva Zelanda, en 1980, por el profesor Peter Molan.