El director comercial de Plus Ultra fue vicepresidente de la aerolínea Avior ligada al régimen de Maduro

La compañía aérea de capital venezolano Plus Ultra, a la que el Gobierno de Pedro Sánchez inyectará 53 millones de euros en ayudas públicas, fichó en 2018 como director comercial a Gibson Preziuso, quien ha sido vicepresidente de la aerolínea chavista Avior Airlines, estrechamente ligada al régimen de Nicolás Maduro.

La multimillonaria financiación concedida por el Gobierno de Sánchez a Plus Ultra ha provocado un nuevo escándalo, ya que esta compañía aérea ocupa un mercado minoritario (sólo vuela desde Madrid con Venezuela, Ecuador y Perú), sus gestores estuvieron implicados en la quiebra de Air Madrid y sus principales accionistas pertenecen al círculo de la vicepresidenta de Venezuela Delcy Rodríguez.

Plus Ultra anunció en julio de 2018 el nombramiento de Gibson Preziuso como director comercial para impulsar las operaciones de la compañía en América Latina, gracias a su «experiencia y amplio conocimiento de la industria aérea a nivel mundial».

Durante los cuatro años anteriores (desde abril de 2014), Gibson Preziuso había sido vicepresidente de Avior Airlines, la compañía venezolana ligada al régimen chavista que en la actualidad tiene prohibido volar sobre la Unión Europea y sobre Estados Unidos, donde ha sido acusada reiteradamente de intentar burlar las sanciones impuestas al Gobierno de Maduro.

Tiene prohibido volar a Europa y EEUU

Avior Airlines tiene su principal base en el aeropuerto de Barcelona (Venezuela) y fue fundada en 1994 por los empresarios Jorge Luis Añez Dager y Rafael Ciarcia Walo, inicialmente para transportar a los trabajadores de la petrolera estatal PDVSA, si bien poco después amplió sus operaciones a los vuelos comerciales regulares.

La petrolera PDVSA ha sido uno de los grandes focos de corrupción del régimen chavista: pagó varios millones de euros por asesorías ficticias al hijo del embajador español Raúl Morodo y en marzo de 2017 varios empresarios blanquearon desde Madrid 159 millones de euros, procedentes de la petrolera, para los tres hijastros del dictador Nicolás Maduro, hijos de su esposa Cilia Flores, como informó en exclusiva OKDIARIO.

En noviembre de 2017, la Comisión Europea incluyó a Avior Airlines (que en aquel momento tenía a Gibson Preziuso como vicepresidente) en su lista negra de compañías aéreas que tienen prohibido volar sobre territorio de la Unión, debido a «deficiencias de seguridad no resueltas» detectadas por la Agencia Europea de Seguridad Aérea.

Un año y medio después, en mayo de 2019, Avior se vio obligada a interrumpir todas sus operaciones con Miami, cuando el Gobierno de Donald Trump ordenó suspender todos los vuelos procedentes de Venezuela alegando incidentes violentos y disturbios en los aeropuertos de aquel país:  “Las condiciones en Venezuela amenazan la seguridad de los pasajeros, las aeronaves, y las tripulaciones que viajan hacia o desde ese país”, expuso la Administración norteamericana al anunciar la decisión.

Avior Airlines ha sido acusada, más recientemente, de intentar burlar las sanciones de EEUU al régimen de Maduro, al entregar un avión Airbus 340-300 de su flota a la aerolínea pública venezolana Conviasa como dación en pago de una deuda.

Según ha informado la agencia Associated Press, un juez de la Corte de Miami confirmó el pasado mes de noviembre los derechos como accionistas de Avior Airlines de dos empresarios, Carlos Kauffmann y Moisés Maionica, que habían actuado como agentes del ex presidente Hugo Chávez.

Carlos Kauffmann y Moisés Maionica fueron condenados en 2008 a un año de cárcel en Estados Unidos por su implicación en un escándalo político por el envío de un maletín con 800.000 dólares a Argentina, en un avión oficial del Gobierno de Venezuela, para pagar gastos de la campaña electoral de Cristian Fernández de Kirchner.

Tras cumplir condena, ambos empresarios pagaron 5 millones de dólares para comprar una participación del 50% en el accionariado de Avior Airlines. El fundador de la compañía, Jorge Añez les negaba ahora estos derechos, pero el juez de Miami Michael Hanzman ha determinado que efectivamente tienen la condición de accionistas de la aerolínea próxima al régimen chavista.

Las ayudas del Gobierno de Sánchez

En su sentencia, el juez acusa a Añez de manipular la contabilidad de Avior Airlines para hacerse con el control de la compañía y de haber mentido en su testimonio para perpetrar un «fraude».

El director comercial Gibson Preziuso no es el único directivo que se ha incorporado a Plus Ultra, procedente de la línea aérea chavista. Plus Ultra también ha fichado como director de sistemas a Zaki Aroutin, quien durante 12 años fue vicepresidente de informática de Avior Airlines (entre 2007 y 2019).

El Consejo de Ministros acordó el pasado 9 de marzo inyectar a Plus Ultra Líneas Aéreas una ayuda pública de 53 millones de euros: 34 millones como préstamo participativo con condiciones privilegiadas y otros 19 millones como préstamo ordinario. Estos recursos proceden del Fondo de Apoyo a la Solvencia, que el Gobierno ha dotado con 10.000 millones de euros, para rescatar a las empresas afectadas por la pandemia de coronavirus.

El Gobierno de Pedro Sánchez justificó esta decisión señalando que «Plus Ultra es una aerolínea de nicho que opera vuelos de larga distancia a países de Latinoamérica (especialmente, Ecuador, Perú y Venezuela)» cuyos clientes son, mayoritariamente, «residentes en España u otros destinos que viajan a visitar familiares o por ocio, además de también turismo». Según la reseña publicada por el Consejo de Ministros, Plus Ultra tiene 345 trabajadores directos, aunque sus actividades generan otros 2.500 empleos indirectos.