Acuamed invirtió en deuda de España 300 de los 1.500 kilos que le dio la UE para desaladoras
La empresa pública Aguas de las Cuencas Mediterráneas (Acuamed) compró bonos del Estado por valor de 300 millones de euros mientras recibía más de 1.500 millones de la UE en forma de subvenciones y créditos para construir desaladoras. La UE pretende esclarecer si sus fondos finalistas para planes hidrológicos sirvieron para rescatar ocultamente deuda del Estado.
La compra de bonos del Estado a entidades privadas fue masiva por parte de Acuamed tanto en 2013 como en 2014. En el primer ejercicio alcanzó los 311 millones de euros y en el segundo un total de 236 millones de euros. Esta actuación inversora le produjo unos ingresos financieros de 22 y 53 millones de euros, respectivamente.
Las inversiones en deuda por un montante de 547 millones de euros realizadas por Acuamed han llamado la atención de las autoridades comunitarias por dos motivos: sus ingresos por ventas son de menos de 50 millones de euros al año; y la financiación de la empresa pública de aguas proviene, en su mayor parte, de las subvenciones, mayoritariamente de la UE.
Acuamed, además, utilizó productos derivados en alguna de sus operaciones financieras como instrumentos de cobertura de tipos de interés “no siendo nunca contratados dichos productos para utilizar de forma especulativa”, cuyo importe a 31 de diciembre de 2014 fue de 47 millones y de 2,2 millones a 31 de diciembre de 2013.
El portavoz de la Comisión europea admitió días atrás que la institución sigue el caso tras conocerse que Acuamed habría usado de manera fraudulenta fondos millonarios, gran parte de ellos procedentes de las arcas comunitarias. En el ejercicio 2013, los fondos europeos asignados a Acuamed ascendieron a 1.000 millones de euros, a cargo de los programas operativos de los Fondos Feder y de los Fondos de Cohesión correspondiente a los períodos de programación 1993-2000, 2000-2006 y 2007-2013.
Estas partidas tuvieron como fin cofinanciar proyectos relacionados con plantas desalinizadoras en el Mediterráneo. Precisamente, la Comisión está intentando averiguar si parte de esos fondos se vieron afectados.
La Comisión Europea ha bloqueado todos los pagos de subvenciones con fondos europeos a proyectos gestionados por Acuamed, la empresa pública investigada por fraude en distintas obras hidrológicas en la costa mediterránea. Bruselas ha ordenado suspender todos los expedientes de obras que aún tienen importes pendientes de pago a España.
Por otro lado, Acuamed firmó en 2012 un crédito con el Banco Europeo de Inversiones (BEI) de 500 millones para construir desaladoras. El préstamo se formalizó a 25 años. Cubre las necesidades de financiación externa de la sociedad, y por lo tanto garantiza la liquidez necesaria para poder acometer la inversión pendiente.
La firma fue publicitada por la vicepresidenta del BEI, Magdalena Álvarez, y el entonces ministro de Agricultura, Miguel Arias Cañete. Según detalló entonces el ministro con este dinero se llevarían a cabo un total de 28 actuaciones en cinco cuencas hidrográficas españolas (Ebro, Júcar, Segura, Mediterránea Andaluza y Cuencas internas de Cataluña). Supone el 83% del total de la deuda.
En paralelo, la Fiscalía Anticorrupción investiga desviaciones millonarias en las liquidaciones de los proyectos más costosos de Acuamed, centrándose en informes de liquidación contradictorios de proyectos como la desaladora de Torrevieja, ejecutada por ACCIONA (unos 300 millones de euros) y la descontaminación del embalse de Flix, llevada a cabo por FCC CONSTRUCCIÓN (unos 190 millones de euros).
Según los documentos, las desviaciones detectadas superarían los 30 millones de euros entre ambos proyectos. En el caso del embalse de Flix, las desviaciones se cifrarían en un 12% sobre un presupuesto de obra de 135 millones.
Acuamed dispone de un patrimonio de casi 2.400 millones y, este año, cuenta con 207,5 millones para realizar inversiones públicas. Por otro lado, la dirección de Acuamed, años atrás planteó un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) sobre el 20% de la plantilla, entonces formada por unos 120 trabajadores.