Trump rebaja más el tono y pide que «no haya violencia ni vandalismo» en las movilizaciones en su apoyo
Tras el desastre causado por las movilizaciones y el asalto al Capitolio del pasado 6 de enero instigadas por el propio presidente saliente en primera persona, Donald Trump recula ya de forma manifiesta ante posibles nuevas movilizaciones de corte violento a una escasa semana de que su periplo en la Casa Blanca llegue a su fin.
Donald Trump ha hecho este miércoles un llamamiento para que no haya «violencia ni vandalismo» y que se respete la ley en las manifestaciones que ya se están organizando a través de las redes para que se lleven a cabo en las diferentes capitales estatales en los días previos a la toma de posesión de Joe Biden.
En un escueto comunicado difundido a través de la web de la Casa Blanca -porque a través de las redes sociales ya no puede, tras la suspensión de sus cuentas-, Trump ha matizado que su petición se produce «a la luz de informaciones sobre más manifestaciones». «Insisto en que no debe haber violencia, infracción de las leyes y vandalismo de ninguna clase», ha continuado, indicando que estas acciones no son lo que él «representa», y tampoco Estados Unidos.
«Pido a todos los estadounidenses que ayuden a relajar las tensiones y mantengan un temperamento tranquilo. Gracias», ha remachado el mandatario. El FBI alertó el lunes al resto de autoridades y agencias federales de la posibilidad de que se produzcan «protestas armadas» en varios puntos de Estados Unidos ante la inminente investidura de Biden como presidente del país.
El informe del cuerpo policial se publicó después de que partidarios de Trump asaltaran el Capitolio durante la certificación de la victoria del candidato demócrata en las elecciones de noviembre, resultado que el actual mandatario se ha negado a reconocer, reiterando la existencia de un supuesto «fraude» cometido en los comicios.
Horas antes del incidente en el Capitolio, el magnate neoyorquino alentó a los manifestantes en una intervención y, después de lo sucedido, no se apresuró a condenar el asalto. En su lugar, pidió a sus simpatizantes que «regresaran a casa» y les dedicó palabras de reconocimiento, como «sois muy especiales».
Popularidad hundida tras el ataque al Capitolio
Por otro lado, la popularidad del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha descendido a raíz del asalto a la sede del Congreso y ya son menos de la mitad los republicanos que estarían dispuestos a votar por él en caso de que intentase volver a la Casa Blanca en las elecciones de 2024.
En noviembre, un 53 por ciento de los votantes republicanos o de los independientes que suelen inclinarse por este partido veían con buenos ojos una nueva candidatura electoral de Trump, que salió derrotado en noviembre frente al aspirante demócrata a la Casa Blanca, Joe Biden. Trump no ha descartado intentar regresar a la Casa Blanca en 2024, una posibilidad que está en el aire si prospera el juicio político que los demócratas han iniciado contra él en el Congreso y que podría inhabilitarle para volver a ocupar el cargo.
La UE no se pronuncia sobre Trump
Desde las instituciones europeas, la UE ha evitado este miércoles pronunciarse sobre el futuro del presidente, Donald Trump, que afronta un juicio político tras abrirse un segundo proceso de ‘impeachment’ en el Congreso estadounidense.
Al ser preguntado en rueda de prensa por los últimos acontecimientos en Estados Unidos, donde el presidente será juzgado políticamente por los altercados registrados la semana pasada en el Capitolio, el actual portavoz del Servicio de Acción Exterior, Peter Stano, ha mostrado su confianza en el sistema de «controles y contrapesos» del sistema estadounidense y en que cualquier eventualidad pueda resolverse con los instrumentos del Estado de Derecho.