Dimite el primer ministro de Líbano en respuesta a las fuertes protestas en el país
Saad Hariri, primer ministro de Líbano, ha anunciado que entregará a Michel Aoun, presidente del país, la dimisión del Gobierno como respuesta a las multitudinarias protestas que está viviendo el país árabe en las últimas semanas por la profunda crisis económica y la corrupción.
El ex primer ministro de Líbano ha hecho el nuncio en un mensaje dirigido a la nación, según ha publicado el portal de noticias Naharnet. «Iré al Palacio de Baabda para presentar la dimisión del Gobierno al presidente», ha dicho.
Las protestas en el país comenzaron después de que el Gobierno decidiera introducir un impuesto al uso de WhatsApp. Este impuesto fue posteriormente eliminado pero no ha hecho que las protestas ceden, de hecho han evolucionado hasta tal punto que ahora la exigencia de la calle es que el Gobierno se marche por las denuncias de corrupción.
Un paquete de medidas económicas
Antes de esta dimisión el Gobierno libanés cedió. Las huelgas generales y las fuertes protestas que se registran en el país del cedro han forzado al Gobierno a aprobar este lunes un paquete de reformas económicas. El primer ministro, Saad Hariri, anunció un recorte a la mitad de los sueldos de los altos cargos y la supresión del Ministerio de Información, según informa la cadena Al Jazeera. Además, todas las fuerzas políticas se han puesto de acuerdo en desbloquear los presupuestos de 2020, sin introducir nuevos impuestos.
Pese a que el detonante de las protestas fue el anuncio de un impuesto a los servicios de voz de WhatsApp, la corrupción y el estancamiento económico son los dos principales motivos del descontento de la población. Por ello, el Gobierno también ha planteado crear un comité anticorrupción antes de final de año, una ley para obligar a devolver los fondos públicos robados, reducir el déficit del sector público, combatir el contrabando, destinar más recursos para las familias pobres e incrementar los impuestos a los beneficios de los bancos.
A pesar del anuncio de las reformas, el Ejecutivo libanés no ha conseguido frenar las manifestaciones. «Nos quedaremos en las calles, no creemos lo que dice el presidente», ha explicado la profesora Maya Mhana este lunes en Beirut a la agencia de noticias Associated Press. Los manifestantes siguen pidiendo que la dimisión del Gobierno, al que acusan de permitir la corrupción y que dejen el poder en manos de jueces hasta que se celebren las elecciones.