Alemania: un iraní detenido en una operación contraterrorista por sustancias químicas
Las autoridades investigan si el hombre planeaba un atentado motivado por el extremismo islámico
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Un hombre iraní de 32 años ha sido detenido en Alemania tras recibir un aviso de agentes de seguridad de Estados Unidos de que podría haber planeado un atentado con sustancias químicas mortales. La Policía y la Fiscalía de Alemania han asegurado que el hombre y otra persona fueron detenidos durante la noche en la ciudad de Castrop-Rauxel, al noroeste de Dortmund. Las autoridades han explicado en un comunicado conjunto que se sospecha que el hombre planeaba un grave atentado motivado por el extremismo islámico, para el que supuestamente había intentado obtener las potentes toxinas de cianuro y ricina. Todo dentro de una operación conjunta en la que han participado agentes de la Policía y especialistas de la Agencia de Control de Enfermedades.
Según un funcionario de seguridad alemán no identificado, no hay indicios de que el sospechoso haya actuado en nombre Irán, sino más que presuntamente apoya a un grupo extremista suní, una minoría religiosa en Irán.
En un comunicado, la ministra de Interior, Nancy Faeser, que ha destacado que «nuestros servicios de seguridad se toman muy en serio cualquier información sobre amenazas terroristas islamistas y actúan», ha señalado que en los últimos años se han evitado 21 atentados islamistas en Alemania.
Faeser ha querido recordar la importancia de la cooperación internacional en la lucha contra las amenazas extremistas. En la actualidad, la investigación se centra en los materiales utilizados supuestamente para el posible ataque, debido a que pequeñas cantidades de ricina, que se produce a partir de las semillas de las plantas de ricino, pueden matar a un adulto si se ingiere, inyecta o inhala. Hace cinco años, la Policía alemana detuvo a un tunecino y a su esposa sospechosos de planear un atentado con ricina en nombre del grupo terrorista Estado Islámico (ISIS). Posteriormente, fueron declarados culpables y condenados a 10 y 8 años de prisión, respectivamente.
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