Michelin y su nueva lista de elegidos
Como cada año la llamada Biblia roja ha celebrado su gala. En los finales del 2022 ha sido elegida Toledo. En una ciudad bella pero poco gastronómica se ha desarrollado una ceremonia nuevamente larga y un tanto plana, en esta edición conducida por Berta Collado.
Esta será la última gala conjunta de Portugal y España, pues en 2023 habrá emancipación lusa.
Como regalo de despedida se han concedido 5 estrellas básicamente lisboetas , y así dentro de una larga nómina de 37 nuevas estrellas se han reconocido a varios restaurantes como Encanto, Kabuki, Kanazwa,o Le Monument de Porto.
Pero la noche ha estado coronada por la irrupción en el olimpo de los triestrellados del restaurante cacereño Atrio o la casa de comidas de los hermanos Torres.
Este acontecimiento Michelin, va adquiriendo el aroma de lo previsible, y aunque en lo singular de su categoría encajaban perfectamente estos restaurantes había mucho runrún que lo auguraba.
De Atrio infelizmente recordado en los últimos meses por el robo de su bodega, siempre se ha considerado por su cocina de lo ibérico con Toño Perez, y la sala con José Polo. Las emotivas palabras de Toño reconociendo que ha sido un espaldarazo a los 45 años en un territorio en principio hostil, tal vez hayan sido lo más sentido de la gala. Los hermanos Torres con su impecable recreación de la cocina mediterránea también han merecido la chaquetilla tribordada.
En el escalón inferior de las dos estrellas, tres irrupciones de diversa consideración. Por una lado Michelin jugando a ganador como norma habitual últimamente, con los dos macarrones a Quique Dacosta en el Mandarin de Madrid con su restaurante Deesa. A su lado, un reconocimiento a la cocina canaria con El Rincón de Juan Carlos en Adeje. Y un más que justo señalamiento de la personalidad infalible del gallego Pepe Viera y su hermosa versión de esa cocina en su rincón privilegiado.
Muchas más incorporaciones que recorren toda la geografía peninsular y que testimonian a la variedad de nuestra cocina, caso de restaurantes recién inaugurados como Ababol de Albacete, Zuara de Madrid, por citar solo algunos ejemplos, de una guía 2023 muy abierta a las nuevas sensibilidades del mundo rural y de la cocina pequeña.
En el capítulo verde igualmente ha habido homenajes a diestro y siniestro con un larga lista de nominados que trasciende de otras ediciones más recoletas. Entre los premios especiales destaca un primer guiño a la sala con la chaquetilla bordada en su primera edición para Toni Gerez, que desde su Castell de Peralada ha recibido como representante lo mejor de un servicio no siempre suficientemente considerado. El emocionado recuerdo a Juli Soler quizás sea el broche que le faltaba a este Michelin 23 en pleno periodo de consolidación y de necesario cambio. Si todo el mundo es bueno como parece comunicar la nueva guía 2023, parece que las categorías son prescindibles .
¡Viva la vida y la gastronomía!