Reacciones a la dimisión de Màxim Huerta
El ya ex ministro de Cultura Màxim Huerta se convertía en uno de los protagonistas de la jornada tras publicarse a primera hora de esta mañana que había sido condenado por un fraude fiscal de más de 200.000 euros. A las 19:00 horas Huerta comparecía en la sede del Ministerio de Cultura y anunciaba su marcha de manera «autónoma» según ha dicho.
Las reacciones políticas no tardaban en llegar, después de que Ciudadanos, el PP y Podemos hubieran pedido explicaciones al Gobierno de Sánchez y la dimisión del recién nombrado titular de la cartera de Cultura.
Albert Rivera, presidente de la formación naranja, era de los más rápidos en pronunciarse. Pocos segundos después de que terminara la comparecencia de Huerta afirmaba que Twitter que «en seis días le dimite un ministro a Sánchez. Llegar a la presidencia del Gobierno a cualquier precio e improvisando para evitar que voten los españoles fue una mala decisión, lo contrario que se necesitaba para dar estabilidad y generar confianza en el futuro».
El coordinador general del Partido Popular, Fernando Martínez-Maíllo, ha dicho este miércoles que «espera» que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, «tenga mejor criterio para gobernar España que para elegir a sus ministros», después de la dimisión del responsable de Cultura y Deporte.
«Solo han pasado cinco días y ya vemos la primera dimisión en el Gobierno de escaparate de Pedro Sánchez por un fraude a Hacienda», ha escrito Maíllo en la red social Twitter. Al mensaje, además, acompañaba un enlace con la noticia de la dimisión de Huerta.
El portavoz del PP en el Congreso, Rafael Hernando, ha asegurado este miércoles tras la dimisión del hasta ahora ministro de Cultura Màxim Huerta que «nunca estuvo capacitado» para el puesto y, por tanto, «no debió aceptar nunca ese cargo», a tiempo que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, «debía de haber intentado no tapar al señor Huerta durante todo el día», tanto «por coherencia de uno como por responsabilidad del otro».
El presidente del Partido Popular de Álava y senador del Grupo Popular, Iñaki Oyarzabal, ha admitido este miércoles que la «rápida» dimisión del ministro de Cultura, Màxim Huerta, «le honra», al margen de «cualquier discrepancia».
Otras fuentes del Partido Popular han considerado que el caso del Màxim Huerta, es el «triste ejemplo» de lo que se puede esperar del «Gobierno improvisado» de Pedro Sánchez.
Así lo ha dicho el secretario sectorial de Cultura y Participación Social del PP, Emilio del Río, tras conocerse la dimisión de Huerta, a quien ha llamado «defraudador a Hacienda y a todos los españoles».
Es ejemplo de «lo que podemos esperar del Gobierno improvisado, que ha llegado sin programa y sin objetivos y por el mero hecho de estar en el poder», ha dicho del Río en un mensaje facilitado por el PP. «Desde el PP vamos a ejercer una oposición leal y responsable para que el Gobierno de todos los españoles responda a la realidad democrática de este país», ha añadido.
Desde Podemos, Pablo Echenique, secretario de Organización de la formación, trataba de apuntarse el tanto de la dimisión: «Del mismo modo que alabamos la decisión del Gobierno de acoger al Aquarius hoy pedimos la dimisión de Maxim Huerta tras conocer que defraudó a Hacienda y dejamos la puerta abierta a una reprobación. A pesar de las reticencias, al final ha hecho efecto», escribía.
Instantes después hacía lo mismo el secretario general morado, Pablo Iglesias: «El Gobierno y el Presidente defendían esta mañana la continuidad de M. Huerta, pero España ya no es lo que era. Como hemos dicho esta mañana, la ciudadanía ya no tolera estas cosas. Felicito al Gobierno por saber escuchar y rectificar, pero sobre todo, felicidades a la gente».
También desde el PSOE
Incluso desde las filas socialistas algunos altos cargos han comentado la dimisión de Huerta: «Gracias Màxim Huerta por aceptar la propuesta de Pedro Sánchez para ser Ministro y por la grandeza con la que das un paso atrás. Poner por delante lo colectivo y el proyecto de cambio que ha ilusionado en este país», era el tuit publicado por la diputada nacional María González Veracruz.
La ministra de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social, Magdalena Valerio, ha subrayado este miércoles que la dimisión de Máxim Huerta como ministro de Cultura y Deporte ha sido «inmediata» y ha recalcado que esta decisión demuestra «la credibilidad» del proyecto de Pedro Sánchez al frente de La Moncloa.
El ex vicepresidente del Gobierno Alfonso Guerra ha afirmado que le parece «correcta» la dimisión de Màxim Huerta como ministro de Cultura y Deporte. Después de saberse que el ministro de Cultura había cometido fraude fiscal, Guerra ha manifestado, en declaraciones al inicio del acto de la presentación del libro «El mito del líder fuerte», de Archie Brown, que el nombramiento de Huerta fue «polémico» y que los resultados demuestran que no fue una «elección acertada».
El portavoz de Cultura del PdeCAT en el Congreso, Sergi Miquel, considera que la continuidad de Màxim Huerta en el cargo era «inviable», aunque cree que su dimisión como ministro de Cultura y Deporte «le honra». «Nos toca reconocer y agradecer su gesto, que le honra a una persona que no viene de la política», ha asegurado Miquel.
La Cultura le despide
El mundo de la Cultura también despide al ministro más breve de la democracia española, Màxim Huerta y confía en contar cuanto antes con un nuevo interlocutor.
El director y guionista Mariano Barroso, elegido presidente de la Academia Cine el pasado fin de semana, ha manifestado su sorpresa por la brevedad de Huerta en el cargo. «Ha permanecido tan poco tiempo que no hemos tenido tiempo de valorar su gestión ni sus proyectos», ha señalado Barroso, que tuvo ocasión de saludarlo durante la toma de posesión hace seis días.
«Me dijo que es un apasionado del cine y que tenía muchas ganas de ponerse en marcha, pero no llegamos ni a fijar fecha para una reunión», ha asegurado. En cuanto a su decisión de dimitir, Barroso ha expresado su respeto. «Imagino que, si ha dimitido, es porque se convertía en un punto débil para el Gobierno», se ha limitado a señalar.
Del próximo ministro espera «que sea una persona solvente y con ganas de darle al cine el lugar que corresponde, como sector estratégico que aporta una tremenda riqueza al país, desde un punto de vista económico y de identidad, cultura, memoria y proyección internacional».
«Estábamos muy contentos de que hubiese un ministerio y un ministro de Cultura, por lo que su dimisión nos parece una mala noticia, lamentable», ha dicho José Miguel Fernández Sastrón, presidente de la SGAE, que ha pedido un reemplazo inmediato «con peso dentro del Gobierno y fuerza para defender esta área».
«Acababa de tomar el cargo, no sabíamos qué iba a hacer con la cultura ni qué programa tenía, así que nos tomamos la misma prudencia al valorar esta marcha que la que tuvimos cuando fue elegido para el cargo», ha señalado Albert Salmerón, presidente de la Asociación de Promotores Musicales (APM), la mayoritaria del sector en España.
El presidente de la ACE (Asociación Colegial de Escritores) y la plataforma Seguir Creando, Manuel Rico, ha opinado que Huerta «no tenía más remedio que dimitir o ser cesado» y que le hubiera resultado «muy complicado» sentarse a negociar sobre los problemas actuales de compaginar el cobro de derechos de autor y las pensiones con escritores jubilados que han sido sancionados por ello.
Sobre su sustituto, confía en que sea una persona «conocedora del sector cultural y familiarizada con los problemas que vive el sector», a la que le reclaman lo mismo que a su predecesor, que tras tomar posesión citó al novelista y político galo André Malraux en su discurso y en el de despedida recurrió a Lope de Vega.
Sacar adelante el Estatuto del Artista, que «marcará un punto y aparte en las políticas culturales de nuestro país», acabar con la incompatibilidad de cobro de derechos de autor y pensiones, que reduzca «radicalmente» el IVA cultural, que aumente las ayudas a las bibliotecas para que puedan ampliar sus fondos, una lucha «eficaz» contra la piratería y la defensa de los derechos de autor.
Desde la Asociación para el Desarrollo de la Propiedad Intelectual (Adepi), su presidente, Antonio Fernández, ha manifestado que no imaginaban que la recuperación del Ministerio de Cultura iba a acabar «estando en boca de todos por un asunto ajeno a la cultura».
Sobre el sucesor de Huerta, sólo ha podido desear al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, «el mayor acierto en su elección» y que se vea refrendado por el «buen funcionamiento» del Ministerio.
El director de la Feria del Libro de Madrid, Manuel Gil, ha expresado su sorpresa por la dimisión de Huerta y ha declarado que, «si las informaciones que han aparecido en los medios son ciertas, su dimisión es un signo de transparencia por parte del Gobierno», aunque ha apostillado que habría que comprobar «si la actividad de Huerta era entonces permitida por Hacienda».
«Me gustaría que la cultura vuelva a estar en el centro de las conversaciones y las preocupaciones del poder público y que se resuelvan temas bastante abandonados como la propiedad intelectual o la ley de mecenazgo», ha añadido.