Puigdemont se burla del Supremo: renuncia a defender su inmunidad al dar por hecha la amnistía
Puigdemont rechaza pedir las medidas cautelares para recuperar su inmunidad a la espera de la amnistía
El ex presidente de la Generalitat tenía 10 días de plazo para acreditar su petición
El ex president de la Generalitat Carles Puigdemont está jugando con el tiempo hasta que llegue la ley de la amnistía. El prófugo de la Justicia no ha solicitado medidas cautelares para defender su inmunidad parlamentaria, retirada por el Tribunal General de la UE (TGUE), al dar por hecho que la ley que prepara el Gobierno de Pedro Sánchez para «olvidar» los delitos por los que está procesado, está cerca. Así lo han confirmado a OKDIARIO fuentes del Tribunal Supremo y el propio abogado de Puigdemont, Gonzalo Boye.
El pasado 5 de julio, el Tribunal General de la UE confirmó la decisión del Parlamento Europeo de suspender la inmunidad europarlamentaria a Puigdemont y al ex consejero Toni Comín. Ambos permanecen huidos de la justicia española desde finales de octubre de 2017, y su entrega a España está pendiente de esa decisión definitiva de la justicia europea sobre su inmunidad.
Esta resolución no es firme, pues los prófugos la han recurrido ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europa (TJUE), la instancia superior. Sin embargo, este recurso de casación no paraliza el procedimiento, salvo que se soliciten medidas cautelares y sean aceptadas hasta que se falle sobre el fondo del asunto. Por lo que el Tribunal Supremo puede reactivar las euroórdenes de busca y captura para solicitar la detención de estos prófugos. Así se lo solicitó la Fiscalía del alto tribunal al juez instructor del procés, Pablo Llarena. Pero éste optó por la prudencia y aseguró que resolvería sobre las órdenes de detenciones cuando el TJUE se pronunciase sobre eventuales medidas cautelares que ambos procesados pudiesen presentar.
Por el momento, no hay noticias de que los independentistas catalanes las hayan solicitado. El instructor ha dado diez días de plazo al ex presidente catalán y al ex consejero antes de adoptar decisión sobre la reactivación de la euroorden. Según ha podido saber este periódico, los prófugos no la han solicitado porque confían en que la amnistía llegará en unos meses. Por lo que Llarena no va a aceptar la petición del Ministerio Público y declinará, por el momento, activar las órdenes de detenciones.
Puigdemont espera amnistía
La amnistía que prepara el Gobierno de Pedro Sánchez está cerca y Puigdemont es consciente de ello. De este modo, Puigdemont vuelve a su estrategia de dilatar los tiempos todo lo posible. De nuevo, junto al polémico Boye juega con los plazos para tratar de dar esquinazo a los tribunales. Como telón de fondo están las elecciones al Parlamento Europeo de junio de 2024. De llegar sin la amnistía en vigor reiniciaría todo el proceso. El caso vuelve a la casilla de salida. El Supremo debería volver a preguntar por la inmunidad del eurodiputado siempre que vuelva a salir elegido.
Fuentes jurídicas consideran que, con el calendario en la mano, Puigdemont no será juzgado en el corto plazo a pesar de haber alterado el orden constitucional promoviendo el referéndum ilegal sobre la independencia de Cataluña. Está procesado por malversación y desobediencia, una vez se eliminó la sedición del Código Penal. En todo caso, gracias al texto de la amnistía que empezó a cocinarse en la sombra durante las últimas semanas a pesar de que Pedro Sánchez se presentó a las elecciones prometiendo traer al golpista detenido de vuelta a España, Puigdemont está más cerca que nunca de esquivar el banquillo de los acusados.
Los planes del Ejecutivo para beneficiar a los golpistas ya han salido a la luz. De hecho, la vicepresidenta en funciones, Yolanda Díaz, viajó hasta Bruselas para reunirse con el prófugo, y ahora, Sánchez ha reconocido que la amnistía está sobre la mesa. «Estamos negociando», ha aclarado el presidente tras ser preguntado por la amnistía en la cumbre de líderes europeos celebrada esta semana en Granada.