El PP confía en que el acuerdo con C’s no caduque tras la sesión de investidura
El Partido Popular confía en que el acuerdo que estos días negocia con Ciudadanos se extienda más allá de la investidura del 2 de septiembre, que ya se asume fallida.
Los populares no descartan una nueva intentona, que, en todo caso, se produciría tras las elecciones del 25-S. En ese escenario, Rajoy aspira a mantener la vigencia del acuerdo con Rivera, que le permitiría negociar con un respaldo de 169 diputados-uno más si se cuenta al de Coalición Canaria- el apoyo de otras formaciones.
«Siempre hemos querido que el acuerdo fuera de investidura y también de Gobierno. Cuanto más dure el acuerdo, para nosotros muchísimo mejor. En cualquier caso no queremos dar por fallida la investidura, estamos trabajando para que sea exitosa», ha afirmado este miércoles el vicesecretario de Organización del PP, Fernando Martínez Maillo que ha admitido no obstante que esa decisión no corresponde a su partido.
Desde Ciudadanos se defiende que el acuerdo será revisado. «No nos adelantaremos a los acontecimientos. Nos reuniremos y tomaremos esa decisión», ha considerado el secretario de Comunicación de Ciudadanos, Fernando de Páramo, en una entrevista en la Cadena SER. Desde el partido naranja siguen instando a Rajoy a «mover ficha» e intentar un acuerdo con Pedro Sánchez.
No obstante, sí afirman que el acuerdo que estos días se negocia tendrá vigencia más allá de la investidura en tanto se trata de un acuerdo «de contenido» y no de «personas».
«Lo que se negocia ahora no es un gobierno, es una negociación para una investidura», ha advertido por su parte la líder de Ciudadanos en Cataluña, Inés Arrimadas.
Se negocian los criterios contra la corrupción
Por otra parte, PP y Ciudadanos han retomado este miércoles en el Congreso de los Diputados las negociaciones, que intentarán concretar qué criterios se exigirán para apartar de un cargo público a aquellos políticos salpicados por casos de corrupción.
El caso de Óscar Clavell, diputado del PP procesado por prevaricación y malversación cuando era alcalde de Vall d’Uixó (Castellón), ha reabierto la polémica y los dos partidos van a aprovechar su negociación de este miércoles para sentar criterio.
Martínez Maillo ha querido dejar claro que el compromiso del PP en la lucha contra la corrupción «es absolutamente claro», pero también hay que «distinguir lo que es corrupción de lo que no lo es».
«No podemos hacer tabla rasa ni podemos dejar que querellas políticas contribuyan simplemente a inhabilitar a cualquier político porque el partido contrario ha decidido acudir a la justicia simplemente por criterios estrictamente políticos», ha añadido, recordando que Clavell fue denunciado por la oposición municipal por una discrepancia administrativa y, en su opinión, no hay corrupción.
El vicesecretario general de Ciudadanos, José Manuel Villegas, dijo este martes que «no es lo mismo meter la pata que meter la mano en la caja» y que la «mala praxis» de un cargo público no debe confundirse con la corrupción, una distinción que, según ha indicado, ya se hizo en Madrid con el PP y en Andalucía con el PSOE.