Casado recupera a Martínez-Maíllo, que será nº 1 del PP al Senado por Zamora
Fernando Martínez-Maíllo llegó a ser coordinador general del PP. Y aunque su posicionamiento en las primarias, muy cercano a la candidatura de Soraya Sáenz de Santamaría, parecía distanciarle de la nueva etapa en el PP, finalmente Pablo Casado contará con él para el Senado.
De este modo, Martínez-Maíllo, dependiendo de los resultados de las elecciones del 28 de abril, estará previsiblemente en la Cámara Alta como número uno del Partido Popular por Zamora. El líder del PP demuestra de esta manera que, pese a la fuerte renovación de sus listas, ha preferido seguir dando cabida a protagonistas de la pasada legislatura del PP que, además, se identificaron claramente por su cercanía a Mariano Rajoy dentro del PP.
Maíllo ha sido presidente de la Diputación de Zamora y ha ocupado el puesto de cabeza de cartel de la lista al Congreso de los Diputados por esta provincia en las últimas legislaturas. Pero el nuevo rediseño de los equipos llevado a cabo por la cúpula de Casado ha hecho que su ubicación como aspirante a la Cámara Baja dé paso a la portavoz del PP en las Cortes de Castilla y León, Isabel Blanco. Pese a ello, no se quedará apeado del legislativo español.
Y es que la lista del Senado de Casado busca evitar una sensación de excesiva depuración dentro del plan general del partido de renovación, algo que ha llevado a que la candidatura de aspirantes a la Cámara Alta vaya a suponer un compendio de personas que se quedarán fuera de una plaza para la lista europea y de aquellos que, como Martínez-Maíllo, pese a haber tenido un peso importante en el apoyo a Soraya Sáenz de Santamaría, han aceptado trabajar por un PP unido y ajeno a las disputas y tensiones del pasado.
Otras personas que han salido de las primeras posiciones en la lucha por el Congreso también encontrarán hueco en el Senado, aunque eso va a suponer un más que leve apretón que dejará fuera de la Cámara Alta a históricos como, por ejemplo, Luis Aznar, responsable de la última comisión de investigación sobre financiación ilegal que tantos sinsabores ha supuesto para la presidenta del PSOE, Cristina Narbona, ligada al escándalo de Acuamed.
Pablo Casado, por el momento, ya ha cambiado a cerca del 80% de sus cabeza de cartel al Congreso por cada provincia. Un proceso al que ha denominado «renovación tranquila» precisamente porque algunos de los afectados tendrán hueco en el Senado o en los parlamentos autonómicos y europeo.