El ministro Duque se lava las manos ante la rebelión de las universidades catalanas separatistas
"No me meto porque opinar es libre", ha señalado el titular de Universidades sobre los rectores afines al independentismo
Cientos de profesores cargan duramente contra las universidades catalanas por su apoyo a los golpistas
El ministro de Ciencia, Innovación y Universidades, Pedro Duque, se lava las manos ante la rebelión de las universidades catalanes separatistas que están adoptando estos días una actitud de connivencia con los violentos CDR, los mismos que forman barricadas para impedir el acceso a las aulas.
El máximo responsable de la competencia de Universidades en el Gobierno socialista de Pedro Sánchez ha declinado este martes valorar la carta de 800 profesores universitarios dirigida a los rectores de los campus públicos catalanes en la que piden la retirada de los manifiestos contra la sentencia del Tribuna Supremo sobre el ‘procés’: «No me meto porque opinar es libre», ha declarado a los medios en Logroño, según informó Ep.
En esta línea de equidistancia con los violentos, Pedro Duque ha llegado a decir que «cada uno opine lo que quiera» y que eso no se lo va a «quitar a nadie». Además, ha manifestado que él no tiene «jurisdicción sobre los rectores», refiriéndose con ello a que esta competencia es de las comunidades autónomas.
«Realmente no tengo jurisdicción sobre los rectores de las comunidades autónomas, pero hablo con ellos y les ofrezco cualquier tipo de ayuda», ha subrayado, añadiendo que «en la mayor parte de los casos están tomando las decisiones acertadas».
En relación a la huelga indefinida en las universidades catalanas convocada por varias organizaciones para protestar contra la sentencia del Tribunal Supremo, Duque ha señalado que «el derecho de la gente a manifestarse o protestar no debe interferir, por coacciones, con el derecho de otras personas a ir clase».
Mensaje a Torra
Por su parte, la ministra de Educación y Formación Profesional y portavoz del Gobierno en funciones, Isabel Celaá, ha querido afirmar «con toda contundencia» que «el derecho a la protesta pacífica de unos» en Cataluña «de ninguna manera puede conculcar» el derecho «de otros a acceder a las clases que le corresponden para continuar con su educación universitaria».
La ministra portavoz ha defendido que «las universidades tienen que permanecer abiertas y contar con las medidas de seguridad que les proporcionen el Estado de derecho». Además, ha indicado que «las universidades, en ejercicio de su autonomía, tienen que prestar el servicio que, con todo derecho, reclaman algunos estudiantes universitarios», lanzó Celaá a la Generalitat de Quim Torra, según recogió Ep.