Mas y Puigdemont pactan la búsqueda de «un proyecto de país claro» tras un encuentro en Waterloo
Artur Mas, ex presidente de la Generalitat, ha viajado hasta Waterloo (Bélgica) para reunirse con Carles Puigdemont, prófugo de la justicia tras el golpe de Estado en 2017. El encuentro, que ha durado hasta cuatro horas, han llegado al acuerdo de dar más fortaleza a la estructura de JxCat para que sea más "eficaz y operativa" para que tenga "un proyecto de país claro".
Artur Mas, ex presidente de la Generalitat, ha viajado hasta Waterloo (Bélgica) para reunirse con Carles Puigdemont, prófugo de la justicia tras el golpe de Estado en 2017. El encuentro, que ha durado hasta cuatro horas, han llegado al acuerdo de dar más fortaleza a la estructura de JxCat para que sea más «eficaz y operativa» para que tenga «un proyecto de país claro».
Según fuentes conocedoras de la cita, los separatistas han apostado por «reforzar» a JxCat, al considerar que ya es una realidad política «consolidada» porque tiene electos en las diferentes instituciones. Los dos líderes han coincidido en la necesidad de que tenga una «estructura operativa y eficaz, con un proyecto de país claro y vocación de centralidad, y con una sigla consolidada que refuerce e incremente la confianza recibida en este ciclo electoral».
La apuesta de los dos ex presidentes podría colisionar con la posición del presidente del PDeCAT, David Bonvehí, quien este miércoles ha pedido en un artículo en La Vanguardia que todo proceso de reordenación se haga sin «autodestrucción». Así ha transmitido las reticencias que alberga él y algunos miembros del partido ante la apuesta de otros sectores para que el PDeCAT se disuelva y quede sólo una única estructura con las siglas de JxCat.
El conseller del Interior, Miquel Buch, que representa el sector crítico con Bonvehí y próximo a los postulados de Puigdemont, ha apelado este miércoles en TV3 a abrir en las próximas «semanas o meses» un «espacio de reflexión» para «reordenar» el PDeCAT. Y ha remarcado, asimismo, que el partido es solo un «instrumento» para lograr los objetivos políticos y que, después del ciclo electoral, «queda claro que la marca es JxCat», porque es la que ha tenido «reconocimiento» por parte de los candidatos.
Durante el encuentro en Waterloo, Mas y Puigdemont, según las fuentes consultadas, han abordado asimismo la situación del proceso soberanista una vez concluido el ciclo electoral, la conclusión del juicio del «procés» y las repercusiones si hay sentencia condenatoria. También han hablado de las dificultades que se están encontrado los huidos Carles Puigdemont y Antoni Comín (JxCAT), y el preso Oriol Junqueras (ERC) para obtener el acta de eurodiputado.
Después del ciclo electoral y la constitución de los ayuntamientos, los contactos en las altas esferas de JxCat y PDeCAT se están produciendo estos días para clarificar cómo se debe ordenar el espacio posconvergente. Actualmente, en este espacio conviven, no sin asperezas, hasta tres elementos que diversos sectores creen que se deberían unificar o, al menos, ordenar.
Primero está el PDeCAT, el partido heredero de CDC; segundo, JxCat, la marca electoral que creó Puigdemont junto con el PDeCAT, que ostenta la propiedad de la misma; y finalmente la Crida Nacional per la República, una asociación impulsada también por Carles Puigdemont junto con el president Quim Torra y Jordi Sànchez, en prisión preventiva.