La legión de ‘enchufados’ de Colau: casi 200 personas que cuestan a los barceloneses 10,8 millones
La alcaldesa tiene sólo para ella 20 asesores que cuestan a las arcas públicas más de un millón al año
Colau mantiene en su puesto a dos cargos nombrados a dedo investigados por casos de acoso machista
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Desde que Ada Colau llegó al Ayuntamiento de Barcelona no ha parado de incrementar los asesores, cargos de confianza y de libre designación hasta conformar dentro del Consistorio una verdadera corte de enchufados vinculados a su formación política que se eleva ya a casi 200 personas. Exactamente, son 184 los colocados a dedo por el Gobierno municipal que conforman la líder de Barcelona en Comú, filial catalana de Podemos, y el PSOE, socio de coalición gracias al cual Colau está al frente de la Alcaldía de Barcelona.
Esta legión de enchufados tiene un coste en sueldos para los vecinos de Barcelona de 10,8 millones de euros al año. Al margen del elevado gasto económico que suponen para el erario público estos nombramientos, algunos de ellos han sido protagonistas de polémicas por ser sus estrechas relaciones con la alcaldesa o miembros de su equipo el mérito para obtener sus empleos, así como por denuncias de los funcionarios por el trato que reciben por parte de estos altos cargos.
Estos cargos, elegidos por Colau y que, en su inmensa mayoría no son funcionarios, se reparten entre personal eventual (asesores) que suman un total de 70; 40 gerentes de organismos autónomos y entidades públicas empresariales; 32 gerentes y directores generales de empresas, consorcios, asociaciones y fundaciones; un síndico de agravios; ocho comisionados y hasta 33 consejeros de distritos.
Precisamente estas últimas dos divisiones del Ayuntamiento son las que tienen cargos de perfil más político creados por Colau para acomodar a los suyos. Los comisionados, además, ejercen funciones que duplican las competencias de las Concejalías del Gobierno municipal. Así, por ejemplo, existe un comisariado de Agenda 2030, otro de Políticas Alimentarias y otro de Diálogo Intercultural y Pluralismo Religioso. Unos puestos con una carga ideológica clara.
Medio millón
Del mismo modo, existe un comisionado de Educación, otro de Empleo y otro de Acción Social, pese a que ya hay altos cargos electos, concejales, que tienen encargadas estas mismas áreas competenciales. A pesar de ello, estos ocho enchufados suponen un coste que se eleva al medio millón de euros anuales para las arcas públicas. En uno de estos comisionados, el de Cultura, colocó Colau al poco de llegar al poder al ahora ministro de Universidades de Pedro Sánchez y miembro de su partido, Joan Subirats, hasta que en 2019 ya concurrió como concejal en su lista electoral.
Los Consejos de Distrito de la ciudad de Barcelona son otro de los chiringuitos en los que el Gobierno de Colau y el PSOE han buscado espacio para colocar a sus peones. Así, los asesores y consejeros del partido de la alcaldesa y de los socialistas copan buena parte de los puestos de estos órganos, que son una especie de ayuntamientos a pequeña escala de los 10 distritos en los que se divide la ciudad. Y si bien, su dirección legalmente corresponde a concejales de la Corporación Municipal, que ya reciben su correspondiente retribución económica, en los mismos se sientan también otras personas, no elegidas en las urnas, a las que se les encomienda la función de consejeros, y en un buen número de casos, perciben también un salario.
En cuanto a los asesores, la propia Colau tiene a su disposición hasta 20 personas, distribuidas entre las que dependen directamente de Dirección de Alcaldía y las que están colocadas en la Concejalía de Presidencia, que orgánicamente también depende de la alcaldesa. La masa salarial de todos ellos supera el millón de euros anuales, según datos de 2022 del propio consistorio barcelonés. Es decir, el gasto de los colaboradores más cercanos a Colau asciende hasta 1.156.826 millones de euros.
Los sueldos de los casi dos centenares de enchufados por Colau son muy dispares y van desde el más bajo que supera el salario mínimo, con algo más de 23.000 euros anuales, hasta los que superan en sueldo a la propia alcaldesa, que se ha embolsado por su cargo 100.000 euros en 2022. Entre estos últimos están la directora general de Barcelona de Servicios Municipales, que percibe 140.000 euros o el director general de Infraestructuras Municipales, que cobra 110.000 euros.
Problemas
Esta elefantiásica estructura de asesores y altos cargos puestos a dedos por Colau le ha generado a la alcaldesa más de un dolor de cabeza e incluso problemas judiciales. En este sentido, le fueron abiertas varias causas por contrataciones de personal perteneciente a su partido o con relaciones familiares con miembros de su propio Gobierno municipal que vulneraban un código ético que ella misma aprobó para acabar con «las malas praxis» cuando llegó al consistorio procedente del movimiento okupa criticando a la casta y las prebendas de los políticos.
Así ocurrió en uno de los escándalos más recientes provocado tras el aprobado por parte de varios asesores y cargos ligados a Barcelona en Comú (Podemos) de unas oposiciones para entrar en una bolsa de empleo del Ayuntamiento de la Ciudad Condal. A las acusaciones de nepotismo también se han sumado estos años en los que lleva al frente del consistorio, otras de parte de los funcionarios por casos de presiones, amenazas y acoso machista procedentes de altos cargos designados por Colau.