Interior provoca «un estado de violencia» en la cárcel al filtrar el vídeo de la reducción de un preso
Un informe revela que desde que las imágenes vieron la luz se ha disparado el clima de tensión entre internos y trabajadores en una de las prisiones con más incidentes del país
El vídeo, que se encontraba custodiado por la dirección de la prisión, fue usado para atacar a una asociación profesional de trabajadores penitenciarios
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El pasado lunes 6 de septiembre una funcionaria de la prisión de Villena, en Alicante, fue brutalmente intimidada y agredida por unos desconocidos en las inmediaciones de su domicilio. Como no puede ser de otra manera el Ministerio del Interior abrió una investigación para aclarar los hechos ocurridos en la cárcel y proteger a su trabajadora. Eso de cara a la galería, porque, de paso, se intentó achacar los hechos a una asociación de trabajadores penitenciarios especialmente incómoda para Instituciones Penitenciarias. La divulgación del vídeo por el que tenía que declarar la subdirectora de seguridad amenazada y la atribución tácita de esas amenazas por parte de Interior a la asociación de trabajadores Tu Abandono Me Puede Matar ha dado pie a un aumento de la tensión y la violencia entre los internos y los funcionarios de la cárcel de Villena.
El 16 de agosto unos funcionarios de la cárcel de Villena tuvieron que poner en práctica medidas de reducción contra un recluso por el comportamiento violento del mismo. La actuación quedó grabada en las cámaras de seguridad de la cárcel y custodiada por la dirección del centro penitenciario, quien, como dictan las normas aprobadas por Interior, abrió una investigación y puso en conocimiento del juzgado de guardia correspondiente los hechos, tal y como dice el reglamento. Como parte de esa investigación el 7 de septiembre la subdirectora de Seguridad de la cárcel tenía que declarar sobre estos hechos y la proporcionalidad de la reducción llevada a cabo por sus compañeros. Un día antes fue abordada por varios encapuchados en la puerta de su casa. La zarandearon y la amenazaron con un mensaje claro: “A ver qué cuentas mañana”. Fue el último episodio tras días de mensajes amenazantes recibidos en su móvil desde números privados.
Inmediatamente después del ataque a la subdirectora se filtró a los medios de comunicación el vídeo de la reducción del preso por la que iba a declarar la responsable. La imagen se acompañó de la insinuación: la asociación TAMPM podía estar relacionada con los hechos. No en vano, la primera citación que se realizó en la investigación interna de la agresión a la trabajadora fue la del delegado de esta asociación en Galicia. Lo que no se tuvo en cuenta a la hora de filtrar el vídeo y la información de la vinculación de la asociación con los hechos, algo no demostrado, fueron las consecuencias que el resto de los funcionarios de la cárcel de Villena estaban a punto de sufrir. Interior no había medido bien su reacción.
Un informe demoledor
OKDIARIO ha tenido acceso a la copia de un informe fechado el 13 de septiembre, este pasado lunes, en la citada prisión. “Los funcionarios que suscriben informan sobre el clima generado y la tensión que se percibe en el módulo”. Así arranca el informe presentado al jefe de Servicios de la prisión y que relata la escalada de peligrosidad en uno de los módulos más complicados de Villena. “Durante esta semana se aprecia un evidente estado de animadversión y violencia verbal hacia los funcionarios que se corrobora con diferentes hechos”. Los funcionarios relatan una serie de hechos que vienen sucediendo en la prisión de Villena desde el pasado día 8 de septiembre, curiosamente el día inmediatamente posterior a la filtración del vídeo de la reducción y las acusaciones a los funcionarios como autores de las amenazas a la subdirectora.
“El día 8 de septiembre, a las 21:45, se produjo un golpeo generalizado de puertas y ventanas acompañado de gritos tales como “torturadores, sois unos hijos de puta, asesinos”. Los autores del informe explican que no consiguen dar con los promotores de la algarada, pero que son varios los presos los que reconocen que la causa del alboroto es haber visto en los medios de comunicación las imágenes del incidente con el preso en el mes de agosto. “Los internos sacan con bastante frecuencia a colación las informaciones difundidas estos días, apreciándose una evidente animadversión hacia los trabajadores”, explica el citado informe.
De hecho, el clima ha ido empeorando con el paso de los días y de los golpes a las puertas y los insultos se ha llegado incluso a los intentos de agresión. Así lo explican los trabajadores recreando un incidente del mismo día 13: “Esta mañana, tras el recuento, estábamos dos funcionarios en la puerta del módulo y nos lanzaron con fuerza una botella de agua llena desde una celda que impactó a poca distancia de nosotros mientras se oía a un interno gritar ‘cabrones, torturadores’. Una vez identificado se le pregunta al autor por los motivos de su intento de agresión, contestando que había visto las noticias sobre lo ocurrido en agosto y que sentía odio hacia los funcionarios”.
Los trabajadores mandan un mensaje en su informe que debería llegar más allá de los muros de la cárcel en la que trabajan, directo a la Secretaría dependiente del Ministerio del Interior. No parece buena idea calentar el ambiente en un lugar hostil por naturaleza como la cárcel. “Esta situación se ha generado por la absoluta irresponsabilidad y desprecio hacia los trabajadores de quien corresponda, provocando un aumento innecesario de la penosidad ya propia de este trabajo y poniendo en riesgo la integridad de quienes tenemos que realizarlo”.