Indignación en JXCAT y ERC con Forn tras su “colaboracionista” declaración ante el Supremo
La defensa del ex consejero de Interior del PDeCAT difiere rotundamente de la estrategia del resto de compañeros de su partido
Sigue el juicio del procés hoy, miércoles 20 de febrero, desde el Tribunal Supremo, en directo.
La declaración del ex consejero del Interior Joaquim Forn en el Tribunal Supremo, el pasado jueves, ha provocado un monumental cabreo en el seno de Junts per Catalunya y en algún alto cargo de Esquerra Republicana. El hecho de que el candidato a la alcaldía de Barcelona trazara su defensa en cuestiones puramente jurídicas y admitiese que el referéndum del 1-O no fue legal y que el ejecutivo no se resistió al 155, ha provocado que los suyos le giren la espalda y duras críticas entre consejeros de Esquerra del gobierno de Quim Torra.
La defensa de Forn, a manos de Xavier Melero, difiere de la del resto de compañeros de partido -Josep Rull, Jordi Turull y Jordi Sànchez-, defendidos por Jordi Pina. El ex consejero del Interior se defiende de las acusaciones mientras sus compañeros acusan al Estado haciendo política. Estrategias distintas que, a pesar de estar coordinadas por el ex diputado de CIU Francesc Homs, presentan importantes diferencias. La más notable, que mientras ayer Turull sólo respondió a su defensa, el jueves Forn también lo hizo a la fiscalía y a la abogacía del estado.
La decisión de Forn, que podría dar argumentos al tribunal a la hora de dictar sentencia ya que admite que cometían una ilegalidad, ha causado un profundo malestar entre los lideres de su formación, sobretodo entre el portavoz parlamentario Albert Batet y la consejera de la Presidencia Elsa Artadi, que incluso se estaría planteando dar el salto como número dos de Forn al Ayuntamiento de Barcelona. En privado, ambos, critican duramente la estrategia de Forn, pese a que a diferencia de ellos él se juega una larga condena de cárcel.
También entre las filas de Esquerra Republicana hay malestar por la forma utilizada por Quim Forn para defenderse de los delitos de rebelión, sedición y malversación de fondos públicos. El consejero de Exteriores del Govern, Alfred Bosch, lo verbaliza en sus círculos más cercanos. Bosch es especialmente duro contra Forn por intentar defenderse diciendo la verdad para rebajar la posible condena.