Illa permite a Navarra reabrir mercadillos mientras exige cerrar Madrid con un riesgo de contagio menor

El Gobierno de Pedro Sánchez está decidido a confinar Madrid, a pesar de que los últimos datos de la región, marcados por los efectos de la primera semana de medidas restrictivas, invitan al optimismo. La incidencia acumulada de la última semana es de 267  contagios por cada 100.000 habitantes, menor por ejemplo que los 358 que registra actualmente Navarra. Sin embargo, el confinamiento de Navarra no sólo no está sobre la mesa, sino que allí se están relajando las medidas restrictivas: desde esta semana reabren sin límites los mercadillos callejeros sin que el Ministerio de Sanidad se oponga.

Moncloa reescribe las reglas de actuación frente al coronavirus según la conveniencia del momento. La pasada semana el ministro de Sanidad, Salvador Illa, aseguró que el criterio de confinamiento de zonas debía regirse por el umbral de los 500 contagios por cada 100.000 habitantes. Una nueva regla, inédita hasta ahora, que encaja a la perfección con la propuesta del Gobierno socialista de confinar, al menos, la capital madrileña: todos sus distritos, excepto el de Chamberí, están por encima de dicho límite.

Pero los planes de acción del Gobierno chocan con otra realidad: la Comunidad Foral de Navarra, gobernada por la socialista María Chivite, muestra a día de hoy tasas de contagio superiores a las de la Comunidad de Madrid. Aplicar los nuevos criterios de Sanidad a Madrid supondría, por tanto, hacerlo a Navarra. Pero de momento ninguna voz del Ejecutivo de Sánchez ha mencionado un posible confinamiento de Navarra. Es más, las medidas restrictivas aplicadas por la Comunidad Foral son más laxas que las que aplica hoy la región presidida por Isabel Díaz Ayuso. Y se están relajando aún  más.

Mercadillos abiertos desde hoy

Desde este mismo lunes, por ejemplo, Navarra ha levantado las restricciones de actividad a los mercadillos al aire libre, sobre los que ahora se aplicaba una limitación del 50% de los puestos. A partir de ahora desaparece esa restricción, permitiéndose la instalación del 100% de los puestos siempre que se pueda cumplir con una distancia de 1,5 metros.

Los recintos podrán permanecer abiertos siempre que cuenten con una zona de entrada y de salida diferenciada, así como caminos de tránsito para los usuarios de un sólo sentido que puedan garantizar la distancia de 1,5 metros entre clientes. El levantamiento de las restricciones se produce tras una negociación con el sector y sin oposición del Ministerio de Sanidad, que es quien debe velar por el cumplimiento de todas las medidas a nivel nacional tal y como se ha arrogado el propio Illa para plantear el cierre de Madrid.

Del resto de medidas que aplica Navarra a día de hoy para contener el virus, todas están incluidas entre las que ya tiene en vigor Madrid. Navarra prohíbe reuniones de más de 6 personas, pero sólo en la vía pública (Madrid también en domicilios privados). El límite también aplica  a la hostelería, donde ambas regiones han establecido restricciones al servicio en barra y a la ocupación de las terrazas. Los actos de culto religiosos y los funerales se limitan a una ocupación del 50%.

Datos optimistas para Madrid

Navarra, con 662 casos por cada 100.000 habitantes en los últimos 14 días, sólo es superada por los 721 que ofreció Madrid en la última actualización del balance de Sanidad. Sin embargo esa cifra muestra la situación de las últimas dos semanas. Si sólo se toma como referencia la pasada, la primera en la que Madrid aplicó restricciones de movilidad sobre las 37 zonas de salud más afectadas, la situación da un vuelco: Navarra tiene peores cifras que Madrid, con 358 contagios frente a 267.

Mientras, Madrid afronta una semana clave para su futuro. Este lunes se han sumado 8 nuevas zonas a las 37 ya perimetradas para contener la expansión del virus. Una medida que según el Gobierno de Sánchez no es suficiente. Moncloa, a través de Sanidad, apuesta por un cierre total o por confinar, al menos, a los 3,5 millones de habitantes de la capital. Navarra, de momento, parece no preocupar al Ejecutivo de Sánchez.

Contagios a la baja

La tendencia a la baja de los contagios viene refrendada también por un centro de referencia nacional para el estudio de la pandemia, el Instituto de Salud Carlos III (ISCIII), dependiente del Ministerio de Ciencia y fuera de toda sospecha de subjetividad en sus datos. El riesgo de contagio, pese a seguir disparado por encima de 700 casos por cada 100.000 habitantes, ha entrado en tendencia descendente.

Así lo certifica el ISCIII en su monitor semanal de incidencia acumulada, actualizado hasta el jueves 24 de septiembre a las 19:43 horas. En el mapa que elaboran con este indicador, Madrid sale en verde.

Ese color verdoso con el que el ISCIII rellena el territorio de Madrid muestra una razón de tasas de 0,93. «La razón de tasas», explica el ISCIII, «es el resultado de dividir la incidencia acumulada de la semana 38 del año (del 14 al 20 de septiembre) entre la de la semana 37 (del 7 al 13 de septiembre). Por tanto, los valores menores de 1 representan una disminución y los mayores, un aumento, de la incidencia acumulada de una semana a otra».

Es decir, la circulación del virus en Madrid en esta segunda ola de la pandemia, a pesar de encontrarse actualmente en los 746,15 casos por cada 100.000 habitantes, da signos de haber empezado a remitir. En la semana 37 era de 383 casos y en la semana 38 baja hasta los 356.